La pasión flamenca se vuelve documental

NEUQUÉN (AN).- “Ya lo vimos bailar, ya lo vimos en película, qué pasaría si aquí, en nuestra región, hacemos algo que reúna dentro del género documental aspectos culturales de nuestra región”. Eso se preguntó el director Oscar Sarhan al momento de encarar “El sur sabe a flamenco”, un documental que se adentra en las raíces de esta danza. El proyecto audiovisual que aborda la tradición española y su danza en la patagonia a través de la bailaora Asunción Miras Trabalón, se estrenará hoy, a las 20, en el auditorio del Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA). La entrada es libre y gratuita hasta agotar la capacidad de la sala. Tal como relató Sarhan la idea de este trabajo surge de un encuentro con Miras Trabalón que barajaba la posibilidad de filmar sobre una bailaora de Jerez. “Mientras la escuchaba me daba cuenta que ella estaba en condiciones por una cuestión de vida, de experiencia, de trayectoria, ella tenía todo a favor para poner esos leños en su propia vida”, confesó el director. Sobre las vivencias a la hora de realizar este documental, la protagonista afirmó que “es una experiencia nueva, superoriginal y muy exigente porque no es lo mismo bailar en escenarios naturales, con otro relieve, con otras luces, que bailar en escenario”. Es una “muy enriquecedora porque el contacto con la naturaleza hace expresar otras cosas y recibir otras cosas del entorno”, agrega. Más allá de una excelente demostración de la danza, el documental de 40 minutos de duración, rescata testimonios sumamente valiosos para la difusión del flamenco. Allí se escucharán las voces de artistas como Rafael Amargo, Merche Esmeralda, Chiqui de Jerez, Ana María Tarenzi, entre otros y, también, historias de inmigrantes que, tal como sostuvo la bailaora “hacen muy rico el contenido, en teoría y en palabras, porque explican de qué se trata el flamenco”. En este sentido el documental logra un equilibrio perfecto entre contenido textual y contenido audiovisual. Miras Trabalón comentó que “es un documental que pretende explicar por qué hay en la zona tanto flamenco, tanto desarrollo y tanta afición al flamenco”. En este camino, Sarhan, dijo que “esto no es un capricho, es un deseo, es un placer de querer ahondar en la raíz propia”. A la vez que agregó “yo me siento orgulloso de poder trabajar con alguien que se cuestiona, que se pregunta de dónde viene ese baile, de dónde viene esa pasión irremediable”. Además, la protagonista de esta historia aseguró que este trabajo tiene gran importancia para “demostrar que no hace falta vivir en España para dedicarse al flamenco o para sentirlo y bailarlo apasionadamente”. “Es nuestra verdad a partir de preguntas propias que buscan una respuesta propia. Después, se abre el juego, uno lo pone a disposición de los que les interese saber algo más, ver una vida desde otro ángulo”, sintetizó el director.