La Policía como organización
ROBERTO ZGAIB (*)
La Policía, como cualquier organización, persigue un fin y para cumplirlo cuenta con herramientas de trabajo (motos, autos, radios, PC, etcétera), un edificio y recurso humano. El manejo del recurso humano es la parte más importante para perseguir y cumplir su finalidad de prevenir y combatir el delito; las herramientas de trabajo y el edificio son condiciones básicas que se deben tener resueltas con el fin de que ese recurso humano pueda cumplir el objetivo, de lo contrario el fin que persigue la organización –que es brindar seguridad– no se cumple en forma eficiente. En cualquier organización existen normas y personas que ejercen la dirección de la misma; quien tiene dicha función es quien aplica las normas, proporciona las herramientas de trabajo y, lo más importante: es el responsable de la gestión del recurso humano para cumplir el objetivo de la organización, sea la venta de un producto o servicio o, como el caso de la Policía, brindar seguridad. Vamos a analizar las expresiones del jefe de la Policía de la Provincia de Río Negro, Fabián Gatti (sería nuestro director de la organización), cuando separó del cargo al policía encargado del Departamento de Toxicomanía: “Gatti anunció además que desplazó al comisario Alejandro Tapia de la jefatura del Departamento de Toxicomanía en función de sus expresiones de no contar con medios para avanzar en algunas causas en conjunto con la Justicia federal”. También dijo: “En esta cuestión somos inflexibles; cuando alguien pone excusas respecto del tratamiento de la toxicomanía no nos interesa que siga estando”. El policía reclama herramientas de trabajo para cumplir el objetivo de la organización, ya que no está a su alcance, como recurso humano, acceder a las mismas si no es a través del jefe de la fuerza, que vendría a ser el director de la organización. No hace falta explicar detalladamente cuál es el resultado de tan desacertada decisión del jefe de Policía. Imaginemos cualquier organización; por ejemplo, una fábrica de autos. Quien se encarga de armar los motores le dice a su director que la línea de montaje de motores debe parar porque falta un elemento que no permite seguir con el ensamblado de los mismos. Imaginemos que el director sea Fabián Gatti: “Gatti anunció además que desplazó al encargado de montaje de motores de la fábrica autos XXX, en función de sus expresiones de no contar con medios para avanzar en el montaje de motores”. También dijo: “En esta cuestión somos inflexibles; cuando alguien pone excusas respecto del tratamiento de la línea de montaje de motores, no nos interesa que siga estando”. Cuando un patrullero demora en llegar (tienen pocos y algunos rotos), cuando no se puede llevar adelante una investigación por falta de herramientas de trabajo, el recurso humano que es el policía siempre está y es con quien nos solemos enojar, pero quienes tienen la verdadera responsabilidad de proporcionarle los recursos a la Policía para cumplir su objetivo son funcionarios como el jefe de la fuerza y sus superiores. Cualquier organización, sea privada o estatal, que no gestione en forma correcta su recurso humano y no le proporcione las herramientas necesarias para cumplir su objetivo fracasa y se torna ineficiente en el cumplimiento del mismo. (*) Presidente de la Cooperadora Policial de Roca
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