Exclusivo Suscriptores

No son las finanzas, es la economía real

Si piensan que siguiendo solo políticas de índole monetarista se arribará al cielo, seguro nos quedaremos sin combustible.

Como señalé en una nota anterior, la cualidad de “idiota” era empleada por los griegos a quienes se desentendían de la “cosa pública”. Así es mantener a toda costa , a la fuerza, un valor irreal del dólar, moneda que dicen que no interesa, en una actitud terca que produce pérdidas millonarias para su mantenimiento y afecta las disminuidas, casi inexistentes, reservas netas del Banco Central.

Entidad que todavía, a pesar de las amenazas, sigue en pie , con menos peso de papeles de deuda, transferidos al Tesoro Nacional en una curiosa ingeniería financiera, sumada a la aún más curiosa práctica contable de capitalizar intereses en lugar de enviarlos a “pérdida”. Cuántas veces los de mi edad, hemos visto y sufrido estos desvarios.

Además se les concede a los exportadores entrar al mercado de cambios comercializando aquí el 20 % de sus liquidaciones, lo que obviamente resta ingresos a las reservas, además de constituir una mecánica espuria.

No nos referiremos en esta nota a la interacción de la tasa de interés y el valor del dólar, a la política bancaria, a la circulación monetaria y los créditos bancarios , al inmenso incremento del endeudamiento del Estado en moneda nacional, etc.

Agreguemos un dato que nos interesa como jurisdicción provincial: las retenciones a las exportaciones restan base imponible a las determinaciones del impuesto a las Ganancias, lo que atenta contra los ingresos de este gravamen, sumando a este regalo las “facilidades” para el pago del saldo del impuesto sobre los Bienes Personales que genera el mismo efecto, empeorándose en el futuro.

Los gobiernos y un país no se reciben con “beneficio de inventario ” y por eso mismo se debe tratar de corregir , modificar , impulsar , etc, políticas que alienten la producción y el ahorro interno aplicado a las actividades así como el ingreso de capitales externos de inversión directa ,la exportación con valores agregados. Pero se hace lo contrario .

Se parte de un sofisma que es atribuir al dólar, utilizado como moneda de cambio (siempre lo fue) y también como reserva de valor (que siempre lo fue aún más) que solo interesa su impacto en los circuitos internos que componen la circulación monetaria y la producción de bienes y servicios, o la inversión. Un terrible error que nos llevará a la pérdida de mercados y la disponibilidad, en el país, tanto de bienes de consumo como de capital y servicios ( excepto los no transables). Así pensado, no interesa que Brasil, por ejemplo, haya devaluado su moneda alrededor del 20 % respecto al dólar argentino y que tampoco importa el movimiento en los pasos cordilleranos a Chile, sin que parezca necesario emplear la razón o la fuerza.

Para completar el panorama destructivo, se libera de retenciones a numerosos productos del exterior, mayormente de consumo final, bajo la excusa que esa política impulsará la disminucion de los precios nacionales .

Menos mal que los (i)rresponsables no han oído hablar de la teoría de los costos comparados y de localización, por ejemplo , lo que incrementaría aún más la pérdida de actividades productivas internas, debido a las desventajas comparativas (que surgen del desorden del orden y sistema económico autóctono ) con la mayoría de países involucrados en las transacciones. Mas aún, al desconocimiento de la escala técnica de producción a que están obligadas las unidades activas (escala que condiciona sus curvas de costos , además incididos por la inflación externa, que existe, sí señor). Un mercado que posee un 50 % de personas con muy bajo poder de compra, lo que ocasiona que el consumo global disminuya continuamente( junto a las exportaciones) produciendo un círculo tóxico de final esperado, lo que es notorio para cualquier estudiante de economía pero no tanto para los graduados y regraduados.

Si se razona así, que con solo políticas de índole monetarista se arriba al cielo, seguro nos quedaremos sin combustible.

* Contador, ex titular de Rentas en Neuquén.


Como señalé en una nota anterior, la cualidad de “idiota” era empleada por los griegos a quienes se desentendían de la “cosa pública”. Así es mantener a toda costa , a la fuerza, un valor irreal del dólar, moneda que dicen que no interesa, en una actitud terca que produce pérdidas millonarias para su mantenimiento y afecta las disminuidas, casi inexistentes, reservas netas del Banco Central.

Registrate gratis

Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento

Suscribite desde $1500 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora
Certificado según norma CWA 17493
Journalism Trust Initiative
Nuestras directrices editoriales
<span>Certificado según norma CWA 17493 <br><strong>Journalism Trust Initiative</strong></span>

Comentarios