Pileta, el destino de las vacaciones

Con la pandemia como telón de fondo, muchos ya tienen decidido pasar el verano en casa. Por eso, desde julio, las consultas y compras de piscinas se incrementaron con respecto al año anterior. Pero, ¿son seguras para evitar contagios?, ¿el cloro sirve de barrera?

Ante la incertidumbre a causa de la pandemia, muchos esperan asegurarse el descanso en el patio de casa.
A falta de viaje al mar, buenas son las piletas. Y tanto las de lona como las de material, parecen haberse convertido en la inversión del 2020 de las vacaciones.


En la mayoría de los comercios de la zona aseguran que crecieron la ventas de piletas de lona. Chicas, medianas y grandes; para todas hubo compras. Con un dato llamativo:las ventas se adelantaron a la primavera, con un incremento del 18 o el 25%, en comparación con años anteriores.
En años anteriores, este tipo de ventas comenzaban a reafirmarse a partir de los meses donde el calor se hacía notar. Pero este año tan particular, el operativo verano en casa ya está en marcha.
Lo cierto es que los negocios que debieron restringir los horarios de atención por las medidas de protocolo, se vieron a su vez restringidos para recibir sus productos. Y en cierta manera, algunos resultaron perjudicados, porque esas “ansiosas compras” , muchas veces fueron resueltas en forma online en comercios de otros lugares.

¿Cuál elegir?


Una pileta de lona, dependiendo no sólo del tamaño y diseño, sino también de la calidad de los materiales, arranca en los $ 8.000, pero puede superar los $ 100.000.
Para aquellos que cuentan con una disponibilidad más amplia, están las piletas que se instalan en forma definitiva.
Las empresas de la zona del rubro de venta e instalaciones de piscinas afirman que se incrementaron las consultas y pedidos de presupuestos. También las ventas subieron en un 30 a 40 % con tiempo de espera para su instalación de hasta 2 y 3 meses.


El Ingeniero Fernando Mattas, representante de iGUi Neuquén Piletas, ubicado en Juan Julián Lastra 4150, de Neuquén, explicó que “si bien no está permitido vender piscinas sin la instalación, las ventas acordadas con el cliente que acepta la instalación a partir de enero, aumentaron en un 30% para esta época”.


“Muchas consultas no significa muchas ventas”, argumentó Mattas. La concreción de ventas restringidas por el cuello de botella para su instalación es un 30% superior desde el mes de julio, cuando lo habitual es que ese tipo de ventas se hicieran en septiembre y octubre.
Por otro lado, Claudio Fraina, dueño de la empresa Fibras del Valle, ubicada enruta 22 de Allen, considera que “la pandemia adelantó las consultas. En años previos, generalmente comenzaban a partir de septiembre en adelante, pero este año comenzaron en fines de junio y julio con ventas incluidas. Hoy en acuerdo con el cliente, las ventas se realizan con un período de espera de dos y hasta tres meses”, agrega.

Otros aumentos
No solo las ventas crecieron. Los costos también.
Todo se incrementó un 30 a 40%, pero también se debe considerar que los insumos aumentaron más que las piletas en sí –donde se estipuló un 10%–. “Ese porcentaje en un valor importante es una suma notoria que se implementa de un día para otro”, explicó Fraina.
También la alta demanda incrementa los costos: se ha cuadriplicado en materia de los insumos y raíz de la pandemia, no hay producción, ya que muchos fabricantes están trabajando solo el 50 %.
También se debe considerar la importancia sobre las garantías de ciertas marcas nacionales como Tigre, en el rubro de las cañerías, Volcán en todo lo que se refiere a los accesorios, filtros, filtros de cañerías, bombas de agua.


En esto, los costos sumaron de un 28% a un 30 %, que se traslada a la venta final del producto.
Ante la existencia de otras marcas mucho más económicas, productos y accesorios que se encuentran en el mercado a un costo a veces mucho más baratos y accesibles, los especialistas subrayan que se corren riesgos por su garantía y durabilidad y porque no hay repuestos en nuestro país al no contar con la importación.

Hoy en día, una pileta o piscina de fibra puede costar entre 400.000 y 700.000 pesos, partiendo de la medida más chica de 5 m x 2,50 m . Con la facilidad de financiación a través tarjetas de créditos, cheques y la promoción de ahora 12, muchos aprovechan la oportunidad para invertir en una piscina, en el patio de casa, quincho o el lugar de descanso familiar.
Estaremos en casa, pero serán vacaciones igual.


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