Cómo evalúa Neuquén el pedido de ajuste de Javier Milei en el gasto del Estado

Neuquén realizó recortes en áreas y las redistribuyó en otras con una lupa política del gobierno de Rolando Figueroa. ¿Dónde se puede realizar el ajuste que pidió Javier Milei? La clave, para variar, está en la riqueza de Vaca Muerta.

El gobierno de la provincia de Neuquén puso a madurar con paciencia los mensajes objetivos y subjetivos que emitió el gobierno de Javier Milei en torno al presupuesto del año que viene y el temerario pedido de recorte de gastos de 60 mil millones de dólares para el conjunto de las 23 jurisdicciones.

El gobernador Rolando Figueroa tendrá una respuesta en la jornada de este miércoles si es que cumple con su agenda de estar presente en un acto oficial. Este lunes, un ministro participó de la conferencia por Zoom en la que dio precisiones de la ley de leyes el ministro Guillermo Franco, sin que se mencionara el tema del ajuste que pidió el presidente.

El ministro de Economía Guillermo Koenig participó de la conferencia que dio el ministro nacional porque la provincia tiene en elaboración su propio presupuesto que esperaba pautas como la inflación esperada o el precio del dólar para hacer los cálculos en torno a los ingresos y egresos que se prevén para el año que viene.


¿Qué analiza Neuquén para fijar postura?


En lo que va del año, el gobierno de Figueroa hizo «esfuerzos financieros» -que tal vez no fueron vistos así por los ojos nacionales- cuando tuvo que hacerse cargo de cubrir la eliminación del fondo de compensación al transporte público de pasajeros.

Del total de dinero que venía de Nación para atemperar el impacto del boleto de colectivo, el 80% era para la ciudad de Neuquén. De esta forma la Provincia continuó con un subsidio para el transporte del interior y el intendente de Neuquén tuvo que ampliar el dinero que pone para el Cole y ahora para cubrir los dos subsidios: el de Nación y el que recibía de la Provincia.

El segundo punto que evalúa Neuquén es que también se hizo cargo de pagar el fondo de incentivo docente que junto a la conectividad fue poco más de 1.100 millones de pesos. En el costo salarial total es ínfimo pero es una cifra que se podría haber destinado a otro fin.

El tercer punto que se balancea es la obra pública. La gestión de Mariano Gaido en la municipalidad sacó cuentas y determinó que fueron unos 15.000 millones de pesos en obras que la comuna de Neuquén capital pagó porque Nación dejó de hacerlo y corrían el riesgo de paralizarse.

Fuera de los límites de Gaido, en la provincia hay unas 46 obras nacionales grandes que están paralizadas o a punto de serlo por el corte de fondos dispuesto por Nación a las que el gobierno de Figueroa puntuó para establecer prioridades y buscar cómo continuarlas.


Envíos de Nación para atrás

En esta línea también se anotó que entre enero y agosto de este año se redujo un 80% el envío no automático de fondos para la provincia que se destinan a coordinación y grandes proyectos, comedores escolares y estímulo a la producción de gas natural. Las transferencias automáticas, es decir la coparticipación federal, tuvo una retracción del 13,5% entre enero y agosto de este año en comparación con el año pasado.

En quinto lugar, Figueroa mostrará que redujo en unos inescrutables 32 mil millones de pesos el gasto político del gobierno porque el 90% de los funcionarios que forman parte de su equipo son empleados de planta permanente y sólo el 10% son «de afuera».

En este punto marca diferencias de forma con su antecesor Omar Gutiérrez quien incrementó las partidas políticas y también el gasto con las empresas constructoras porque permitía la actualización por IPC de las deudas que podían ser originadas en atrasos propios de la burocracia estatal o por inconvenientes atribuidos a cuestiones exógenas.

Y aquí se llega al nudo de la cuestión y que permite entender por qué se madura (o se tarda) una reacción ante el pedido de ajuste de Javier Milei y cómo se planta Neuquén para no quedar en el centro de la lupa nacional.


El centro de la cuestión: Vaca Muerta

Por un lado ¿Por qué Neuquén no adhiere al Régimen de Incentivo para las Grandes Inversiones?, este mecanismo implica, ni más ni menos, dejar de cobrar impuestos a inversiones que superen determinado monto en dólares y si la provincia y municipio adhieren, dejarían de cobrar Ingresos Brutos, Sellos y los municipios las tasas retributivas, como lo hizo Río Negro para abrir los brazos al proyecto de YPF y Petronas en Punta Colorada para potenciar Vaca Muerta

Una primera respuesta es que no hay ningún proyecto de esa envergadura en Neuquén que presione para una decisión así. Una segunda respuesta es la que dio el gobernador Figueroa: se esperará a ver la letra chica de la Ley Bases en lo referente al capítulo de Hidrocarburos. El proyecto original de este proyecto que envió Milei al Congreso se olvidaba de la reforma constitucional de 1994 y la ley corta de Hidrocarburos 24145, que modificó la 17319 -del gobierno de facto de Juan Carlos Onganía-. Estas normas le dan el dominio de los recursos naturales a las provincias.

Después por intermedio de los diputados nacionales se logró reformular el 75% del articulado pero, desconfiado como pocos, Figueroa esperará a que salga la reglamentación, por las dudas.

El temor es que con la devaluación posasunción de Milei en la Presidencia, las regalías que recibía Neuquén se multiplicaron en dólares en forma virtual pero también real porque aumentó la producción destinada al mercado interno y la que se exporta.

Esto le permitió a Figueroa mantener la política paz social -léase dar aumentos por IPC- sin mayores altibajos y, después de una década -punto a favor- no pidió plata prestada para pagar sueldos públicos.
De cada diez pesos que gasta el Estado Neuquino, casi 5 son por regalías, 3 por recaudación propia -el principal contribuyente es YPF- y 2 por coparticipación federal que está en baja.

La postura neuquina en defensa de las regalías debe ser actualizada por los gobiernos provinciales, que antes eran de pura sangre del MPN y ahora es mestizo, porque en términos ideológicos la postura del entonces kirchnerismo era que los recursos eran nacionales, y por ende esa jugosa renta.


Ordenar para redistribuir

De acuerdo a lo que informó el diputado nacional Osvaldo Llancafilo, el gobierno nacional reconoce una deuda millonaria que data desde 2017 con la provincia porque no envió los fondos para equilibrar la caja de jubilaciones que Neuquén no transfirió a la Nación. Esa cifra se la ubicó en unos 180 mil millones.

Con el tema caja jubilatoria hay diferencias bizantinas con el gobierno nacional porque para que se destraben fondos de ayuda se requerían condiciones igualitarias porque no se podía financiar a una provincia cuyos trabajadores estatales se jubilen a los 55 años frente a otras que se jubilan a los 65, también se debate cómo se calcula el haber de los pasivos.

El gobernador hace hincapié en que la reducción de gastos por planes sociales cuyos beneficiarios se redujeron a la mitad, dejar de pagar actualizaciones por IPC a las constructoras, reducir de 4.500 a 2000 los cargos políticos y bajar contratos por utilización masiva de camionetas y celulares, no fueron un achique y punto.

Se aclaró que con la declaración de emergencia en salud y en seguridad, se destinaron fondos para los hospitales públicos y el sistema carcelario.


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