Problemas crónicos de desbordes cloacales en Roca: un riesgo sanitario para los vecinos

Los desbordes de líquidos cloacales en las calles de Roca no parecen tener solución en lo inmediato y en el medio quedan los vecinos de sectores en donde hay problemas crónicos, quienes deben convivir con olores nauseabundos y riesgos sanitarios.

Río Negro identificó varios sectores en donde se producen periódicamente pérdidas cloacales.
En la calle Jujuy entre Guemes y el Canalito es uno de ellos. Allí desde hace meses hay derrames de distintas dimensiones. Elena, una comerciante de la zona remarca que se ha quejado en reiteradas ocasiones ante la municipalidad de Roca y Aguas Rionegrinas, la empresa que presta el servicio de agua y cloacas en la ciudad.

Elena le ha reclamado a la empresa estatal por los derrames cloacales y a la municipalidad porque no limpian en esa cuadra, y esto hace que los líquidos no circulen hasta una alcantarilla y se acumulen en la calle.

“Como verán ahora hay barro. Se junta ese barro y se va tapando, entonces, ¿qué pasa? Todo los líquidos que salen en la esquina se estancan porque no corren. Cuando vienen y destapan, por lo menos a veces corre, Pero eso es una vez al año”, describió Elena.

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La comerciante aseguró que lo peor es en el verano, por la proliferación de moscas y los problemas sanitarios.

“Los que estamos acá todo el día nos fumamos todo el olor, que es un riesgo para la salud”, remarca Elena.

Cabe que remarcar que allí, a pocos metros, también hay una residencia geriátrica.

El histórico sector de José Ingenieros y Resistencia

Otro sector con problemas crónicos es la calle José Ingenieros, en su intersección con Resistencia. En esa esquina una tapa de cloaca pobremente señalizada muestra la desidia que deben soportar los vecinos.
Sobre la calle Resistencia es llamativo que cuatro casas están totalmente cerradas y una de ellas incluso tiene un cartel de venta. Allí un barro de color negro impregna la calle de tierra.

Sobre la calle José Ingenieros, Martín trazó un panorama desolador: “Una vez por semana revienta la cloaca”. El joven explicó que desde hace alrededor de 10 años se reproduce este problema.

“La municipalidad se lo tira a Aguas Rionegrinas. Y Aguas Rionegrinas se lo tira a la municipalidad. Es como un ida y vuelta y nunca hubo solución”, aseguró.

“Se han presentado cartas, se han presentado quejas, se han presentado un montón de cosas. Pero la respuesta es la misma. Tirarse la bola uno al otro”, aseguró Martín.

En la recorrida que realizó Río Negro el miércoles, justo en la zona del hospital de Roca, sobre calle Gelonch, una marea de líquidos cloacales bajaba hacia mendoza desde la rotonda que está frente al Colegio Secundario 9.

Allí dos operarios de Aguas Rionegrinas luchaban por destapar una cañería mientras miles de litros de efluentes se volcaban en la calle.

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Otro sector que tiene también problemas es la calle Santa Cruz, entre 9 de Julio y Tucumán.
Por esa zona suelen bajar líquidos cloacales, justo sobre la vereda donde alumnos y padres deben caminar día a día por la presencia de un jardín y un colegio religioso.

Qué dijeron Aguas Rionegrinas y el municipio sobre los derrames

Aguas Rionegrinas y el municipio de Roca respondieron a la consulta de Río Negro sobre los derrames cloacales en las calles de Roca.

Desde la empresa estatal rionegrina se afirmó que la firma “mantiene una intervención constante en diferentes puntos de Roca ante los inconvenientes operativos registrados en el sistema cloacal. El personal de la cuadrilla local realiza tareas diarias de monitoreo, desobstrucción y sanitización, con el apoyo del camión hidrojet”.

La empresa reconoció desbordes en zonas como Jujuy entre las vías y Güemes, José Ingenieros y Resistencia, y barrio 827 Viviendas, entre otras, el jefe del servicio Pablo Ster, dijo que estas situaciones están vinculadas a inconvenientes puntuales: una de las bombas principales de la planta cloacal se encuentra fuera de servicio por quema de bobinado, y en su lugar se opera con una bomba alternativa de menor caudal.

A su vez, en sectores como Rosario de Santa Fe y Evita se “reiteran taponamientos por el mal uso de la red cloacal. Allí, el equipo realiza frecuentes limpiezas de cañerías, retirando trapos, plásticos y otros residuos inadecuados”. Además, se aplican tareas de sanitización con cloro según protocolo.
La municipalidad, por su parte, indicó que la “provisión y mantenimiento de los servicios de Agua y Cloacas son responsabilidad de la Empresa Provincial ARSA”.

Los reiterados desbordes cloacales y pérdidas de agua potable en diferentes puntos de la ciudad “ponen en riesgo la salud de la población, generando además falta de presión de agua en diferentes sectores”. Paralelamente -indicaron desde la gestión de María Emilia Soria- otro grave problema que generan estas pérdidas constantes es el deterioro de las calles y la generación de pozos en tierra y pavimento, que deben ser reparados en forma reiterada lo cual implica gastos onerosos para el Municipio.

“Lamentablemente tenemos que seguir invirtiendo en bacheo porque las pérdidas de agua y cloacas por roturas de cañerías de ARSA siguen sin solucionarse”, se explicó desde el municipio. “Si bien se debe destacar que con esta nueva gestión provincial hemos podido estrechar el dialogo y solucionar algunos reclamos, el origen del problema de los pozos persiste porque aunque los arreglemos, los pozos vuelven a aparecer una y otra vez, los de siempre y otros que son nuevos”.

La explicación de ARSA, indicó la municipalidad- “se centra en la antigüedad de los materiales con que fue construido el sistema troncal y que su renovación requiere de una inversión que sólo podría financiar un organismo internacional”.