Un concejal ejerció violencia verbal a docentes y el Deliberante pidió su apartamiento del cargo

El cuerpo en pleno, por mayoría, expreso un repudio institucional y también rechazó lo ocurrido. "Promovemos el respeto, el diálogo y la convivencia pacífica como valores fundamentales".

El Concejo Deliberante de Río Colorado transita una situación completa por un hecho de violencia verbal e intimidación denunciada por docentes de una escuela local contra un edil a quien le pidieron su apartamiento del cargo público hasta que la Justicia dirima su situación.

El episodio ocurrió días atrás en una escuela pública de la localidad del Valle Medio a donde concurrió el concejal del Partido Justicialista, Ángel Calvete, quien habría mantenido un altercado verbal con dos trabajadores de la educación, una de ellas la directora del establecimiento, a quienes increpó por temas de índole familiar. Un hijo del edil concurre a ese establecimiento.

Trascendió que los docentes radicaron una denuncia policial por el episodio.

El hecho motivó una sesión extraordinaria del Concejo Deliberante esta semana en la cual la mayoría de los concejales (la totalidad del bloque JSRN, UCR y un representante del PJ, de los tres que tienen banca) aprobó un “repudio ante hechos de violencia”, según valoró la concejal Alanlía Lezica ante la consulta de este diario quien recordó que el año pasado se aprobó la ordenanza de Ficha Limpia y este caso encuadraría en uno de sus artículos que reclama que los funcionarios públicos deben acreditar una “conducta acorde en ejercicio de sus funciones”. Podría ser aplicable la sanción o remoción del cargo.

En el escrito, que se acordó y difundió, el Deliberante pidió “por cuestiones éticas el apartamiento del cargo público, hasta tanto la situación se aclare”.

En el repudio oficial consideraron que “como agentes públicos” deben “tener un comportamiento ejemplar ante la sociedad que hoy nos lo demanda” y remarcaron que las cuestiones de género “no deben jamás ser vulneradas por representantes públicos” -aludiendo a la condición de mujeres de las agredidas verbalmente- y que tampoco los docentes por su condición deben ser objeto de “algún tipo de agresiones”.

El Deliberante se cuida en su texto de acusar directamente a Calvete al indicar: “Si los hechos presuntos realmente han ocurrido, este cuerpo los repudia absolutamente, pidiendo por cuestiones éticas el apartamiento del cargo público, hasta tanto la situación se aclare”.

Los concejales señalaron que como cuerpo promueven “el respeto, el diálogo y la convivencia pacífica como valores fundamentales. La violencia en cualquiera de sus formas no es una vía aceptable para resolver conflictos”.


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