Un riñón para Gaby: el Ipross asegura que cuando se pueda concretar el trasplante, se financiará

El titular del Ipross llevó tranquilidad a la joven bombera de Bariloche espera un trasplante desde hace 10 años.

El presidente del Ipross, Alejandro Marenco, aseguró que el sistema de derivación para trasplantes “ha funcionado sin inconvenientes” desde el 2019 hasta hoy y, recalcó que la obra social provincial mantiene convenios con “instituciones de alto nivel como el Hospital Universitario Austral, el hospital Argerich y el hospital Australiano”.

La aclaración surgió tras la viralización del video de Gabriela Jara, una bombera barilochense de 29 años, que relata su angustiante espera por un trasplante de riñón que ya lleva una década. Cuando tenía tan solo 19, fue diagnosticada con lupus, una enfermedad autoinmune que comenzó atacándole sus riñones.

En diálogo con RÍO NEGRO, la joven comentó que inició todos los estudios médicos en la Fundación Favaloro a fin de concretar el trasplante, diez años atrás. A un paso de terminarlos, se vio afectada por la caída del convenio de la obra social con esa institución. Retomó los estudios en el Policlínico Neuquén, pero según indicó, al terminar todo, volvió a ocurrir lo mismo.

Marenco aseguró que se comunicó con Gabriela y su familia el último jueves. “Lo que sucede es que la Unidad de Trasplantes de Neuquén cerró porque no era viable económicamente. De hecho, nos agradecieron por el trabajo conjunto y acordamos que cuando reinicien las actividades, volveremos a hacer un convenio”, señaló el titular del Ipross.

Aseguró que hay muchos pacientes en lista de espera y que los trasplantes se realizan con regularidad, sin inconvenientes. “La obra social sigue las normativas vigentes y asegura la continuidad del tratamiento ya sea por convenio directo o por pago anticipado -cuando esto se pacta con la institución-. Hay una lista de prioridades del Cucai (Centro Único Coordinador de Ablación e Implante de Río Negro), pero no es el caso de esta joven que hoy tiene otras necesidades de tratamiento que no son las del trasplante”, manifestó.

Gabriela relató a este diario que, en el último tiempo, le detectaron un tumor pequeño en la mitad de uno de los riñones que debe ser extirpado “en una cirugía de riesgo”. La operación estaba prevista para la semana pasada pero un episodio de hipertensión que registraron los médicos obligó a posponerla.

Tras la comunicación que mantuvo con la muchacha, Marenco aseguró que ella solo quiere permanecer en la lista de espera por el riñón y que su información médica permanezca disponible para no tener que someterse nuevamente a una infinidad de estudios.

“Donde se pueda concretar el trasplante, vamos a financiarlo. Lo que necesite, lo tendrá como todos los trasplantados. Es por ley. Ella sigue en lista de espera porque ya esta registrada en el Cucai. Pero hay que redimensionar que hoy, no necesita un órgano sino la continuidad de otros tratamientos”, aclaró Marenco.


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