Procesaron al dueño de la embotelladora por no realizar aportes a sus empleados

A partir de una denuncia realizada por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), la Justicia procesó sin prisión preventiva al empresario cipoleño Néstor García, por una presunta retención indebida de aportes previsionales superior a los 1,4 millones de pesos.

García, propietario del grupo Embotelladora Comahue SA, deberá hoy notificarse de la decisión ante el Juzgado Federal de Roca, a cargo de Hugo Greca.

Según se observa en la cédula de notificación se estima que, durante los meses de febrero, marzo, abril, mayo, junio, julio, octubre y noviembre de 2013, el empresario no habría ingresado al fisco los aportes previsionales que sí les retuvo a los empleados de su empresa. Cabe destacar que según la Ley Penal Tributaria (Ley 24.769) García podría enfrentar una pena que va desde los 2 a 6 años de prisión.

El documento detalla que “el presente sumario se inició a raíz de la denuncia presentada por el Dr. Hugo Armando Hernández, en su carácter de representante del Fisco ante el Ministerio Público Fiscal con asiento en esta localidad, en fecha 14 de octubre de 2016; relatando que la firma Embotelladora Comahue S.A. habría cometido el delito de apropiación indebida de los recursos de la seguridad social al no ingresar oportunamente los aportes al citado Régimen”.

Fuentes que participan de la defensa de García aseguran que el procesamiento será apelado.

Pero esta no fue la única notificación que recibió el empresario durante estas últimas horas. Según trascendió de fuentes ligadas a la causa, también se embargaron las cuentas a pagar de los clientes del grupo Embotelladora Comahue SA por lo que se le acotan a la firma las posibilidades de continuar en actividad ya que no está recibiendo fondos por las ventas realizadas.

El grupo de empresas que hoy maneja García se encuentra en concurso preventivo con una deuda certificada del orden de los 310 millones de pesos, de los cuales cerca de 300 millones tienen como acreedor a la AFIP.

A esto se le suma una millonaria deuda posconcursal y el reciente rechazo de una nueva moratoria presentada ante el organismo recaudador.

El grupo de empresas que maneja García se encuentra en concurso preventivo. La AFIP es el principal acreedor, con un reclamo superior a los 300 millones.