Reabrió el centro de esquí donde una avalancha mató a un amigo de Gaudio

Baguales es un complejo privado que pertenece a una sociedad entre el extenista y el catarí Abdulhadi Mana A Sh Al-Hajri.

El exclusivo centro de esquí Baguales, donde el año pasado murió un turista al ser alcanzado por una avalancha, puso al día sus papeles con la provincia, cumplió con todos los trámites exigidos y esta temporada trabaja con su habilitación en regla.

La ministra de Turismo de la provincia, Martha Vélez, informó hoy a este diario que Baguales quedó en condiciones de trabajar porque “ya obtuvo su habilitación”, de la que carecía el año pasado cuando ocurrió el accidente. Vélez dijo que desconoce si está recibiendo esquiadores, porque “seguramente dependerá de las condiciones de nieve”, que hasta hace un par de días estaban al límite en toda la cordillera.

Baguales es un centro de esquí privado que trabaja con un público no masivo y suele estar ausente de las campañas de promoción turística encaradas con presupuesto oficial. Pero el año pasado ganó súbita notoriedad nacional cuando el 1 de septiembre una avalancha de placa causó la muerte de Carlos Crupi, un empresario de 39 años, residente en capital federal, que practicaba snowboard en las pistas del complejo. Los guías que lo acompañaban nada pudieron hacer.

El episodio generó fuerte polémica en aquel momento porque el turismo estaba prohibido y también, según reconoció la provincia al día siguiente, el complejo “no estaba autorizado para operar”.

Baguales está ubicado a unos 60 kilómetros al sur de Bariloche, en cercanías del lago Guillelmo, y se accede por un desvío que nace en la ruta nacional 40. Su propietario es el inversor catarí Abdulhadi Mana Ash Al-Hajri y en la sociedad propietaria, al menos en aquel momento, tenía una participación el extenista Gastón Gaudio.

La ministra Vélez dijo que y que hoy Baguales está en condiciones de trabajar con turistas porque “presentó dos los avales, los seguros y los planes de contingencia, que fueron evaluados y aprobados en función de la actividad que realizan”. Agregó que la investigación sobre lo ocurrido con el accidente que le costó la vida a Crupi “va por otros carriles”.

Se practica «esquí fuera de pista». Mediante snowtrucks llevan a los esquiadores hasta lo alto de los cerros.

Señaló que, además de los permisos para las áreas esquiables que utilizan, también tramitaron la habilitación del “lodge” en el que se alojan sus clientes. Baguales ofrece experiencias de esquí “fuera de pista” para deportistas experimentados y no cuenta con aerosillas ni medios “remontapendientes”, sino que traslada a los esquiadores y snowboardistas con vehículos de oruga hasta los filos, donde inician las bajadas.

Según Vélez, las exigencias que planteó la provincia “son las que están establecidas en la ley de Truismo de Aventura” y Bagueles es el único centro de esquí de ese tipo en jurisdicción rionegrina. “Los otros complejos son Catedral y Perito Moreno, pero tienen cada uno su ente regulador”, explicó.


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