Robert de Niro, un “Pasante de moda” con humor

Las comedias de corte refrescante aún tienen cabida en el Hollywood actual, y aunque hace un tiempo que ninguna logra el éxito, “Pasante de moda” –con Robert de Niro y Anne Hathaway a la cabeza– llega dispuesta a lograrlo. El filme se estrenará en la Argentina el jueves próximo y mañana, a las 20, habrá una avant premier para los ganadores del concurso de “Club Río Negro” en Village Cines Neuquén. Nancy Meyers es la directora del filme, y también de “Alguien tiene que ceder”, y le dio todo el protagonismo a De Niro en uno de sus roles más cómicos y tiernos. El ganador de dos Oscar se mete en la piel de Ben Whittaker, quien acepta un trabajo como becario en una firma de moda por internet que lidera la joven Jules Ostin (Hathaway). Lo hace porque tiene 70 años y quiere seguir activo después de toda una vida trabajando. Ostin se lo toma a broma al principio, pero con el tiempo se va dando cuenta de las habilidades innatas de su nuevo empleado para conectar con la gente del equipo, de su carisma personal y de su indudable experiencia, lo que a la postre le convierten en su mejor amigo con la muy cinematográfica Nueva York de fondo. Curioso es que la película empezó a surgir en los estudios Paramount y que al final terminó por cambiar de manos e incluso de actores. Inicialmente iban a ser Tina Fey y Michael Caine quienes encarnaran a los dos protagonistas, pero los problemas de presupuesto y de agenda terminaron por ubicar a De Niro y a Hathaway, la sustituta de Reese Witherspoon, quien tampoco quiso aceptar el papel. Aunque se trata de la primera colaboración entre ambas estrellas, la química funciona, siempre con el humor presente y con la maestría de De Niro manteniendo el peso del filme. El actor se siente cómodo en esa clase de papeles, que además le sirvieron para volver a estar nominado a un Oscar una década después de “Cabo de Miedo” por “El lado luminoso de la vida”. Hathaway parece especialmente contenta de haber podido conseguir semejante papel, y no solo por el privilegio de trabajar junto a De Niro. En una entrevista reciente con la revista “Glamour”, manifestó que a sus 32 años, muchos de los roles que le interesan se los está quedando gente más joven, de 20, una época que a ella le sirvió precisamente para convertirse en la estrella que ahora es. Por su parte, la coguionista de “El padre de la novia” cree que éste es el mejor papel de hombre que ha escrito hasta la fecha. “Esta película examina a los hombres más de lo que normalmente se hace”, indicó Meyers, emocionada de haber podido contar con estos dos intérpretes pese a los muchos cambios a lo largo del camino. Dice, pese al toque indudable de Hollywood, que se inspiró en eventos de la vida real para escribir la película.

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