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Sabbag compró las chacras y galpones de Mocciola en Valle Medio

La operación incluye: unas 750 hectáreas, con plantaciones de pomáceas, carozo, cerezas y algunas en blanco; y galpones de empaque con cámaras de frío.

El Grupo Mocciola finalmente se deshizo de todos sus activos ligados a la actividad frutícola localizados en la región del Valle Medio de Río Negro, concentrados en la empresa Miele SA.


Hace tiempo que Domingo Mocciola estaba en busca de compradores. En un principio había avanzado en las negociaciones con una importante empresa de Cipolletti, pero las conversaciones quedaron truncas por diversas causas.


Casi en forma inmediata apareció interesada la familia Sabbag, cuya nave insignia en la comercialización de frutas es la firma Emelka, constituida oficialmente en el 2000, aunque hay que señalar que los actuales directores son tercera generación participando en la actividad.


“Hace un año que comenzamos a hablar. A nosotros nos interesaba adquirir esos activos por la sinergia que nos podía generar en nuestro negocio”, señaló en dialogo con RÍO NEGRO, Ariel Sabbag, director general de Emelka.

A fines diciembre del año pasado quedó consolidada la operación: poco más de 750 hectáreas de campo -entre plantaciones de pomáceas, carozos, cerezas y superficie en blanco-, cuatro máquinas de empaque -para embalar las especies mencionadas-, y una importante estructura de frío paso a manos de la familia Sabbag. “No podemos dar valores de venta porque hemos firmado un acuerdo de confidencialidad sobre este tema”, confió Sabbag al ser consultado sobre el monto final de la operación. Varios son las millonarias cifras que circulan en el mercado, pero ninguna es oficial.


El empresario destacó que, para la compra de estos nuevos activos, la familia Sabbag contó con el apoyo de un socio minoritario que fue quien aportó parte de la inversión requerida, señalando que todo el control de las operaciones comerciales de esta nueva oferta de fruta será liderado por Emelka. “La firma que hizo el aporte financiero está ligada al sector agropecuario, pero no en forma directa con la fruticultura del Valle”, remarcó Sabbag.


Cabe destacar que Emelka es una empresa que tiene su producción concentrada en el Valle Medio y cuenta con infraestructura de servicios en Villa Regina. Hoy comercializa alrededor de 18 millones de kilos de peras y manzanas.


Con esta operación ambos ganan. Los Sabbag esperan crecer en su oferta productiva un 35% en forma inmediata y dejar de tercerizar los servicios de empaque y frío. Un dato no menor a la hora de hablar de productividad y baja de costos. Domingo Mocciola, se deshace de un activo sobre el cual ninguno de sus hijos estaba interesado. Optó por una salida ordenada de su actividad en Valle Medio.


-¿Por qué tomó la decisión de seguir invirtiendo en la Argentina?, consultó RÍO NEGRO a Sabbag.


-“Es una buena pregunta. Muchas veces también yo me la hago. La respuesta tiene varias aristas. Primero porque veo que es una excelente oportunidad para mi empresa. Son varios los puntos que definen que esta compra es una buena inversión. Este año quedó demostrado que el mundo seguirá demandando en forma creciente alimentos, e interpreto que el mismo escenario se va a ver reflejado en el mercado frutícola”, detalló el ejecutivo.


-¿La segunda arista?, repreguntó RÍO NEGRO.


-“Somos argentinos, es nuestro país. Crecimos en el Valle sumergidos en las chacras y en los galpones de empaque. He visto a mi padre y a mi abuelo trabajando estas tierras. Somos tercera generación en la fruticultura, y eso nos genera una responsabilidad adicional. Sigo apostando a la fruticultura porque esta región tiene condiciones únicas para producir y sus peras y manzanas son destacadas en todo el mundo”, finalizó Ariel Sabbag.


Claves para entender la adquisición de estos activos


La compra de Miele en Valle Medio abre muy buenas expectativas para el Grupo Sabbag. La operación terminó de cerrase, entre otros, por cinco puntos clave.

La cereza, un producto clave que incorpora Emelka.


-El costo de oportunidad que significaba para la familia Sabbag el hecho de que Mocciola se estaba quedando sin potenciales compradores en la medida que el tiempo avanzaba y no podía cerrar su operación de venta.


-El cambio de escala que significa la adquisición de 750 nuevas hectáreas, la mayor parte de ellas en producción. Según datos de Ariel Sabbag esto determina un crecimiento del orden del 35% respecto de los volúmenes comercializados previo a la adquisición de Miele.


-Los nuevos galpones de empaque y frío que se incorporan le permitirá a Emelka concentrar la mayor parte de su producción en servicios propios, cosa que, hasta ahora, gran parte, estaba tercerizado lo que generaba mayores costos.


-La ampliación de la canasta de futas. En la incorporación de estas nuevas 750 hectáreas existen una superficie importante de pera Abate Fetel, alrededor de 35 hectáreas de cerezas y poco más de 10 con carozos. Emelka hasta la temporada pasada sólo comercializaba pomáceas. Tal vez, lo más importante en superficie y en valor, esta dado en la cereza que es hoy la niña bonita del Valle por la que se obtienen retornos muy altos, más aún tras la apertura del mercado chino.


-Ampliación del ciclo comercial. Las tierras de Miele tienen una importante superficie plantada con la variedad de manzana Pink Lady -que se cosecha tradicionalmente a partir de mediados de abril-. Es decir que Emelka a hora iniciará su temporada frutícola en noviembre con la cereza y la terminará con la Pink Lady en abril. Esta ampliación también se verá reflejada en las operaciones comerciales.


Datos

35%
aumentará Sabbag su oferta productiva tras la adquisición de las chacras de Mocciola.
35
son las hectáreas de cerezas que ya están en producción, un nuevo producto para la canasta de frutas de la firma.

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