El “costo de crianza” en números: cuando el sostén de los hijos, es deuda para las mujeres

Criar, cuidar y garantizar las necesidades básicas de un niño o niña de 1 a 3 años costaba 116.050 pesos en mayo de 2023, según el Indec. En promedio, una familia con un chico de 0 a 12 años, necesitaba disponer de 99.063 por mes, solo para ese niño. Claro que ese costo es variable según la situación y las condiciones particulares de cada familia y hogar.

Lee También

El “costo de crianza” en números: cuando el sostén de los hijos, es deuda para las mujeres

Los datos provienen de la “Valorización mensual de la canasta de crianza de la primera infancia, la niñez y la adolescencia”, una estadística pionera en Argentina, que se publicó por primera vez este año, oficial.

La canasta incluye el costo mensual para bienes y servicios (alimentación, vestimenta, transporte, educación, salud, vivienda) y se suma el costo de cuidado que surge a partir de poner en valor el tiempo requerido para hacerlo, y que -en muchas ocasiones- es trabajo invisibilizado.

Además, la comparativa interanual de valores, deja ver que el incremento -en todos los tramos- fue superior al 100%, de mayo de 2022 a mayo de 2023.

Hogares monoparentales

La cantidad de hogares monomarentales supera 1,6 millones en Argentina, el 11,7% del total relevado por las estadísticas, según datos que compartieron desde el colectivo de economistas feministas Paridad en la Macro. Se suma a esta cifra, el dato de Unicef que sostiene que en el 50,2% de los hogares en los que no vive el padre, no recibió ningún tipo de cuota alimentaria en los últimos seis meses y el 12% sólo la recibió algunos meses.

Lo que indica que en estos hogares, los hijos están a cuidado casi exclusivo de sus madres, quienes en ocasiones se terminan endeudando económicamente para sostener los costos de la crianza.

Es el caso de Paula, una mujer de Roca, empleada estatal, tiene dos hijos a cargo de 8 y 4 años, se separó del padre de los niños hace años. Por diferentes circunstancias, hoy afronta la crianza, el cuidado y el sostén económico de los niños casi en soledad.

“Estas dos semanas de vacaciones que no tuvimos el privilegio de salir por ahí de vacaciones, estamos 24 horas juntos”, contó. Su día a día es pensar en ellos y cómo conseguir dinero. Solo puede hacer una actividad recreativa para sí misma por el tiempo reducido y el presupuesto con el que cuenta.

Alquila una casa para los tres que ronda los 100.000 pesos, trabaja y afronta la crianza con ayuda de una niñera que percibe alrededor de 90.000 pesos por mes. Se endeuda con el supermercado, tiene gastos fijos de escuela y actividades extracurriculares de los niños. “Es bastante estresante en ese sentido, que todo recaiga en mí. Cansada como siempre, una hace lo que puede”, concluyó Paula.

Es violencia de género

Virginia Flores, abogada del equipo técnico del Programa “Acercar Derechos” del Ministerio de las Mujeres, Género y Diversidad de Nación, confirmó que en la mayoría de los casos de incumplimiento de la prestación alimentaria se trata de mujeres que están atravesadas por situaciones de violencia de género; y se acompaña de manera integral.

La abogada integra Quillagua, una organización de Roca que viene trabajando la temática, desde donde buscan “visibilizar la falta de cumplimiento de esta responsabilidad por parte de los progenitores, en su mayoría varones” y el impacto “negativo” que producen en sus hijos y en las mujeres, especialmente aquellas que quedan exclusivamente a su cargo del cuidado de esos hijos.

“Acercar Derechos” es un programa de Nación de 2021 que busca fortalecer el acceso a la justicia de personas que están en situación de violencia por motivos de género, desde un acompañamiento legal y psicosocial. En Río Negro existe un solo equipo y está en Roca. Ya se asistió a 230 personas en toda la provincia, 115 en Bariloche y 90 en Roca. “Actualmente estamos acompañando a 61 situaciones de lo que es el Alto Valle y 30 de Bariloche”, contó.

“La mayoría de las situaciones que nos llegan están atravesadas por la problemática de los alimentos”, contó Flores. Desde la creación del programa, en junio de 2021 hasta el 30 de junio de 2023, se asistió a 24.149 personas y el 62,32% de las situaciones están atravesadas por situaciones de violencia económica y patrimonial. Dentro de esa violencia económica y patrimonial se encuentra como indicador la falta de pago de la prestación alimentaria en favor de los hijos. Otro dato es que de esas situaciones el 86,5% de las personas tienen hijos menores de edad a cargo y con un cuidado casi exclusivo, no percibían alimentos o lo que reciben no les alcanza.

También, dijo que existen casos de madres jóvenes (entre 18 y 20 años) que prefieren no pedir los alimentos por el nivel de riesgo que les implicaría reclamar al progenitor violento o a un abuelo, abuela paterna. “Prefieren pasar necesidades a tener que solicitar a ese progenitor violento porque temen a que se concreten situaciones de violencia física o que se incremente ese nivel de violencia”, aseguró.

Hay falta de responsabilidad para con los hijos en un deber de asistencia tan básico como el mantenimiento y la crianza, una de las conclusiones de Quillagua.

“Deudores alimentarios”: la ausencia en cifras

En Río Negro hay un total de 870 deudores alimentarios declarados al 18 de julio de 2023 en la nomina oficial aportada a RIO NEGRO por la Dirección de Registro Civil de la provincia. Se llama deudores alimentarios a aquellas personas que adeudan total o parcialmente tres cuotas alimentarias consecutivas o cinco alternadas.

Este listado, que se publica por Boletín Oficial, duplica y más la cantidad de personas de la nómina difundida en 2020, cuando se registraron 400 deudores. La Ley 3475 (Redam), es el registro de deudores alimentarios y tiene como autoridad de aplicación el Ministerio de Gobierno a través de la Dirección de Registro Civil y de las Personas.

Por otro lado, según estadisticas del Poder Judicial de Río Negro, los juicios por alimentos están a entre los procesos más frecuentes del fuero de Familia. En los últimos cinco años, pandemia mediante, hubo un total de 4.866 juicios por alimentos en toda la provincia. El promedio anual fue de 973 casos y el 2021 fue el año con más procesos contra deudores alimentarios: 1.233.

Esos juicios tienen una instancia de mediación que suele ser fructífera para acordar la cuota, pero si ese acuerdo se incumple, jueces lo ejecutan; se ordenan embargos de sueldo, vehículos o se pueden disponer otras medidas cuando no tiene trabajo ni bienes registrados; como la retención del carnet de conducir, del celular y prohibiciones de ingreso.

En Cipolletti, hay varios antecedentes como el de un deudor alimentario que pasaba preso los fines de semana por no pagar la cuota a su hijo y otro caso en el que le remataron el auto, o hasta la quita del celular.

El 13% de las madres da a luz, sin pareja

Año a año, cientos de madres dan a luz en Río Negro sin pareja al momento del parto. Según datos del Departamento de Estadística del Ministerio de Salud de Río Negro, de 2018 a 2020 un total de 3.596 mujeres no convivian con pareja al momento de parir a sus hijos, lo que implica que -en la mayoría de los casos- empiezan a afrontar la maternidad en soledad o en compañía de otras redes no paternales.

En promedio, significa el 13,2% de las rionegrinas que dieron a luz durante esos tres años. 2019 fue el año en el que más casos se registraron, totalizando 1.300 mujeres que se reportaron sin pareja conviviente de enero a diciembre, un 14,25% del total.

En los datos se puede analizar que en general las localidades más pequeñas de la provincia, son las que tienen tasas más altas de esta variable, que para la mirada del ministerio de Salud, no deja de ser una condición de riesgo y/o vulnerabilidad, al igual que la edad de la madre y el nivel de escolaridad.

Por citar algunos ejemplos, en 2015, un tercio de las mujeres que dieron a luz en Pilcaniyeu no convivían con pareja, en 2018, un tercio en Guardia Mitre. Otras localidades de la región sur como Comallo y Jacobacci presentaban tasas superiores al 27% de madres sin pareja en esos años. Hubo pequeñas variaciones año a año, pero la estadística siempre se mantuvo cercana al 12%.