El tano que sigue cortando el pelo con navaja

Antonio “Tony” Sartore tiene 90 años. Durante medio siglo fue peluquero de los allenses y hoy sólo abre las puertas de su negocio a antiguos clientes, amigos y familiares.

“Mi familia no quiere que trabaje más, pero mi oficio lo llevo en la sangre”, afirma Antonio Sartore, un tano de 90 años, mientras le corta el pelo con navaja a un cliente en su peluquería ubicada en el centro de Allen.

Tony, como lo llaman sus amigos, nació en Cittadella en la provincia de Padua y llegó a integrar la Resistencia partisana, un movimiento armado que se opuso al fascismo durante la Segunda Guerra Mundial.

A los veinte años llegó a Allen y puso su peluquería en la calle Brentana, que funcionó por cinco décadas hasta que cerró sus puertas en agosto del 2013.

Ahora sólo abre su local cuando viene alguno de sus antiguos clientes o sus nietos. Se pone su chaqueta y toma la navaja para darle forma a la cabellera, como en los viejos tiempos.

A los doce años ya cortaba y afeitaba en Italia. Luego en 1948, tras la Segunda Guerra Mundial, vino al país a probar suerte. “Los inmigrantes llegamos con una mano adelante y otra atrás, no teníamos un mango”, explica.

Su primer trabajo fue en la cosecha de manzanas hasta que, “con $ 275”, le compró la peluquería a un hombre de Cipolletti.

Los muchachos de antes

“Los peluqueros de ese tiempo no tenían la moda del corte con navaja a los caballeros y el desmechado a las damas”, recuerda Tony, que fue un pionero en la región. Antes las máquinas de cortar el cabello se usaban a mano. Algunas todavía las tiene guardadas en los estantes de su local. Luego con el tiempo compró las eléctricas.

El estilo con navaja incluía un lavado de pelo, secado y spray. Ahora realiza sólo el corte y la tarifa es de $ 280.

Cuando viene alguno de sus amigos, Sartore prende las luces del histórico salón y acomoda el sillón que tiene unos 100 años. Después de las 18 suele recibirlos.

A veces le duelen un poco los hombros, pero no perdió la agilidad de sus manos, aunque ahora tarda un poco más.

“Cuando era joven les corté a 42 clientes en un sábado. Toda mi vida trabajé 18 horas de domingo a domingo”, cuenta nostálgico este tano, que en el 2007 recibió un reconocimiento en el Concejo Deliberante de Allen por su trayectoria profesional.

Tony formó su familia con una argentina hija de italianos. Tiene dos hijos, nueve nietos y diez bisnietos. Uno de sus nietos siguió sus pasos y abrió su peluquería en La Plata. También tuvo un aprendiz que luego inauguró su propio salón en Allen.

El día que su vida pendió de una afeitada

“Mi familia no quiere que trabaje más, pero mi oficio lo llevo en la sangre. Toda mi vida trabajé 18 horas de domingo a domingo”.

Con 90 años, Antonio Sartore todavía atiende a sus viejos clientes.

Tony llegó a Allen en 1948. Cuando logró juntar algo de dinero, compró la peluquería de la calle Brentana que permaneció abierta hasta el 2013.

Datos

Cuando estaba en Italia les cortó el pelo a los soldados nazis mientras pertenecía a la Resistencia partisana. “Los alemanes que iban a cortarse el pelo me pagaban con el pan, no había nada para comer”, recuerda.
A la peluquería en la que trabajaba solía concurrir un capitán nazi. “Él no sabía que yo era partisano. Si se enteraba me mataba”, relata.
Una noche en Año Nuevo el alemán ingresó a la peluquería. Siempre quería que Tony le afeitara la barba. En esa oportunidad puso su pistola en una mesa.
“Si veo sangre, te mato”, amenazó al joven italiano. “Lo afeité y cuando terminé le pasé la piedra lumbre. Me felicitó y me volvió a repetir que si veía sangre me mataba. Y yo le respondí que antes lo cortaba con la navaja”, dice riéndose.
“Mi familia no quiere que trabaje más, pero mi oficio lo llevo en la sangre. Toda mi vida trabajé 18 horas de domingo a domingo”.
Tony llegó a Allen en 1948. Cuando logró juntar algo de dinero, compró la peluquería de la calle Brentana que permaneció abierta hasta el 2013.

Adherido a los criterios de
Journalism Trust Initiative
Nuestras directrices editoriales
<span>Adherido a los criterios de <br><strong>Journalism Trust Initiative</strong></span>

Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios