En el inicio de la temporada, los turistas reclaman más frecuencias en la terminal de ómnibus de Bariloche

El movimiento en la terminal de ómnibus de Bariloche era incesante este viernes por la mañana. Gente esperando adentro del establecimiento rodeada de valijas y bolsos, otros haciendo colas en las boleterías y muchos otros -jóvenes en su gran mayoría- sentados en el piso afuera de la estación aguardando la llegada de los micros.

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Como en cada verano, los turistas que deseaban viajar hasta el Bolsón en el mismo día no encontraron pasajes; mientras que los micros con rumbo a Chile también salían repletos de pasajeros. La cantidad de israelíes que viajan con destino a Pucón llamó la atención.

«Hay combis que salen del aeropuerto a El Bolsón que van llenas. Por eso, muchos turistas se organizan para tomar un taxi que les sale unos 30 mil pesos«, explicaron empleados de la terminal. Hacia La Angostura, no suele haber inconvenientes porque, según indicaron, abundan las frecuencias.

Gabriel y Kelly esperaban la salida de su ómnibus rumbo a Lago Puelo. La pareja oriunda de Almagro, ciudad de Buenos Aires, llegó a Bariloche el 2 de enero. En esta ocasión, viajaron sin sus dos hijas ya que una de ellas consiguió trabajo. «Es la primera vez que cambiamos playa por montañas. Fue una muy buena decisión«, admitió el hombre que solía transcurrir sus vacaciones en la costa atlántica bonaerense.

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«Nos aburrimos de playa después de tantos años y además, nuestras hijas ya están grandes. Vinimos sin auto así que nos manejamos muy tranquilos en colectivo para todos lados», señaló la mujer. Respecto a los precios en el sur, Gabriel consideró: «Hay que buscar precios: un agua en el Centro Cívico te sale 550 pesos y si te alejás un poco más, la conseguís a 450. Así con todo. De todos modos, no nos volvemos locos. Estamos de vacaciones y al ser solo dos -y ya no cuatro-, los valores cambian«.

A unos pocos metros, Andrea, una marplatense, esperaba el micro que la llevará de vuelta a su casa. Sucede que viajó al sur para pasar las fiestas con su hijo, su nuera y su nieto que viven en Ingeniero Jacobacci. Respecto a su paso por la terminal de Bariloche, observó el estado de los baños. «Viene turismo no solo nacional sino mucho extranjero. Es una vergüenza«, se quejó.

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Julia, de Olavarría, debió pasar la noche en la terminal de ómnibus ya que su micro con destino a Valdivia -donde vive su hijo- sale este viernes en horas del mediodía. La mujer consideró que «debería haber más frecuencias y conexiones entre las empresas con los distintos destinos«. «Llegué anoche con cuatro horas de atraso y salgo a Chile recién hoy a las 12.30. No había hospedaje y lo que poco que había era imposible pagarlo. Había mucha gente en la terminal en la misma que yo», sostuvo.

Tomás y Micaela, de la localidad entrerriana de Caseros, estaban a punto de partir rumbo a La Angostura. Pasaron año nuevo en Bariloche, luego unos días en El Bolsón. Aseguraron que consiguieron pasajes, pero habían tomado el recaudo de sacarlos algunos días antes. «Una pareja que conocimos en Circuito Chico nos dijo que no habían tenido suerte«, expresó el joven.

Micaela se mostró sorprendida por la diferencia de precios entre Bariloche y El Bolsón. «Para cenar en Año Nuevo, nos pidieron como 30 mil pesos en Bariloche. Lo más barato eran 12.900 pesos, que es una noche de hotel. Al final, pedimos una pizza que resultó carísima pero por lo menos, comimos algo porque estaba todo cerrado. Tampoco pudimos hacer excursiones: para ir a Isla Victoria, eran 30.000 pesos. Así que, nos manejamos en colectivo», contó.

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En uno de los bancos más alejados de la terminal, estaban Daniel y Yaneth, con su hijo Joaquín, de Comodoro Rivadavia. Los dos adultos se conocieron durante el viaje desde Chile a Bariloche. «Habíamos comprado trasbordo pero en la frontera, hubo demoras y al llegar a Bariloche, el micro a Comodoro ya había salido. No nos esperaron. Tuvimos que pasar la noche acá. Había un montón de gente como nosotros», relató Daniel con suma molestia.

Recién consiguieron pasajes para este domingo. «que tuvieron»Los tuvimos que volver a pagar. Te venden el trasbordo pero deberían considerar un tiempo límite, al menos, de una hora. Conseguimos un alojamiento acá cerca, pero todo es plata que no teníamos prevista. Hay que comer, pasar el rato. Para ir al banco a sacar plata, tuve que tomar un taxi que me salió 1.100 pesos», mencionó Yaneth.