Ruta 237, cerca de Bariloche: la inesperada atracción de los guanacos por la sal que pone en riesgo su vida

La zona con más presencia de estos animales es cerca de Bariloche sobre la Ruta 237. Desde el Parque Nacional Nahuel Huapi estudian la población de guanacos y explican las amenazas a su conservación.

En la Ruta 237, especialmente cerca de Bariloche hay que transitar con cuidado. Hay, pintorescos, de huesos finos y altos, muchos guanacos. Hay tantos que desde el Parque Nacional Nahuel Huapi emitieron un comunicado destinado a los conductores: “extremar la precaución al transitar”, dicen, “porque se registra un aumento de estos animales, especialmente cerca de la calzada”.

Para el Parque Nacional Nahuel Huapi la presencia de guanacos en la cordillera no es una novedad. De hecho, desde 2019 desarrollan un proyecto de conservación. Hoy está a cargo de Juliana Nielsen, guardaparque de Conservación Territorial que explica así el trabajo que vienen realizando: “Desde este programa le ponemos el foco a esta especie de vertebrados de valor especial, es decir, es una especie que está incluida dentro de un listado con el que trabajamos en el Parque y con el que buscamos minimizar y mitigar las amenazas, alteraciones o disturbios que pueda sufrir la población de guanacos.

Guanacos sobre la Ruta 237: el atropellamiento, uno de los principales problemas


Uno de los principales problemas de conservación del guanaco es, justamente, el atropellamiento que sufren. “Tal vez creemos que hay muchos guanacos, porque los vemos juntos sobre la ruta”, explica la especialista, “pero hay que saber que hoy tenemos solamente un 5% de la población original de guanacos, es decir, un 5% de lo que había antes de la colonización”.

En invierno bajan a buscar alimento a la ruta. Foto: gentileza

El guanaco es una especie que puede andar en grupos, de familiares, juveniles o no reproductivos. También pueden hacerlo en soledad. Y desde el Parque los siguen, los identifican y llevan un conteo. Según el último relevamiento hay nueve tropillas o grupos familiares sobre la Ruta 237 y 280 guanacos en propiedades privadas. En total estiman que son unos 500 animales en todo el Parque.

La pregunta que surge a esta altura del año es: ¿Por qué bajan a la ruta? ¿Qué buscan? ¿Qué tiene el asfalto que no tengan las laderas de la montaña?  “El guanaco es un arquitecto ambiental”, dice Nielsen, “se alimenta en los machines de altura y frecuenta otros sectores de las laderas, colinas donde habita. Y en invierno, cuando esos lugares se congelan o tienen nieve, descienden a lugares más bajos a conseguir alimento”.

Pero, sobre la ruta se encuentran con algo más. Un producto que los atrae. Así lo explica la guardaparque: “Más allá de que la disponibilidad de alimento está en las partes bajas, encuentran en la ruta algo distintivo y que les favorece”, dice, “que es el agua con sal sobre la ruta. Esta agua con sal la utiliza Vialidad Nacional para descongelar manchones de hielo y para evitar que se congele la ruta. Y los guanacos la consumen porque es próspera para ellos porque necesitan de ese mineral para acondicionar sus procesos digestivos de celulosa”.

La sal sobre la ruta, es la tentación de estos animales. Bajan a lamer el asfalto.  “Por eso”, agrega Nielsen, “es común en estas épocas del año que desciendan a consumir esa sal”. Pero, según esta especialista, no son los únicos, también lo hacen los ciervos y otras especies que se ven atraídas por el agua salada.  

Cuáles son las zonas dónde hay más guanacos sobre la Ruta 237


Desde el Parque Nacional Nahuel Huapi identificaron dos zonas, que son las más habitadas de guanacos que bajan a la ruta. Por tanto, dos lugares clave para bajar la velocidad y prestar atención.

Allí, en ambos sitios, sobre la Ruta 237 se colocaron carteles para prevenir. Uno de esos lugares es en el anfiteatro, cercano a la zona conocida como La Cantera. Y el otro, a un kilómetro aproximadamente de Villa Llanquín, en dirección al norte, el sector conocido como La curva de Burges. “En ambos lugares hay presencia de estos ejemplares que pueden llegar a los 70 individuos sobre la cinta asfáltica”, explica.

Los guanacos son herbívoros nativos de Sudamérica. Foto archivo.

Los carteles están de manera preventiva, para que los conductores disminuyan la velocidad al transitar por esas zonas. Están tanto para quienes transitan en dirección norte como para quienes lo hacen en dirección sur. “Pusimos en las dos direcciones”, explica, “pero lo que necesitamos es que la gente respete este tipo de cartelería. Porque son zonas con ejemplares, pero también son sitios de maniobras difíciles”.

Este año, desde el Parque Nacional Nahuel Huapi, registraron cuatro guanacos muertos sobre la ruta. “Para una población que es chica y que viene creciendo, es un número considerable, además se suman a las muertes naturales que tienen otros ejemplares”.

Las amenazas del guanaco en el Parque Nacional Nahuel Huapi


El guanaco es una especie nativa, habita en América del Sur y es pariente de los camellos. Como cualquier animal tiene amenazas. “Es una especie que disminuyó la cantidad de ejemplares y encuentra fragmentada sus poblaciones”, analiza Nielsen y dice: “una de las principales causas de muerte es la caza furtiva, seguido por el atropellamiento en ruta. Después le siguen los perros asilvestrados, es decir, perros abandonados en el Parque que atacan a los guanacos. Y, por último, como es un animal que circula bastante, el atasco en alambrados”.

Antes de cerrar, Juliana Nielsen hace una recomendación y un pedido a la población: quienes transiten por la Ruta 237 y observen la presencia de guanacos, avise. Pueden enviar fotos, videos y un mensaje a conservacionnh@apn.gob.ar “Nos permite trabajar en la prevención de accidentes”, explica, “y también ahuyentarlos de la ruta”.


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