Calles anegadas, barro y basura tras la lluvia

Mauro Pérez

NEUQUÉN (AN).- La intensa lluvia que se registró el martes por la noche generó grandes inconvenientes en los barrios del oeste, donde se anegaron calles y hubo 12 pedidos de asistencia por inundaciones. Desde el municipio se abocaron a destapar bocas de tormenta ante el alerta de más precipitaciones durante los próximos días.

Si bien el chaparrón no se prolongó durante mucho tiempo, la intensidad con la que cayó el agua no permitió que el suelo absorba y se generaron varios inconvenientes en el oeste de la ciudad. Barrios como San Lorenzo y Gran Neuquén se vieron perjudicados por el arrastre de agua con basura y arcilla de las bardas. Ayer por la mañana se reiteraba en todas las manzanas la misma imagen, los vecinos baldeando las veredas y tratando de sacar el barro que se había acumulado en sus puertas.

Raquel, una vecina que vive sobre la calle Avenida del Trabajador al 4.200, explicó que en toda la cuadra entre Godoy y El Colibrí el agua se estancó, porque las bocas de tormenta estaban selladas con el sedimento que arrastraba el agua. “Yo venía llegando de viaje y me encontré con este panorama, el nivel del agua se levantó como 50 centímetros y se me metió adentro de la casa”, explicó. También manifestó su bronca porque “esto pasa todo el tiempo y no hay soluciones. Uno paga los impuestos para que no hagan las cosas que tienen que hacer o para que las hagan mal”, reprochó.

Otro punto crítico se advirtió sobre las calles Novella y Potente, donde se ubica una pequeña plaza de Gran Neuquén Norte. En ese lugar la basura rebalsaba por todas partes: había pañales usados, botellas, ramas de árboles, bolsas de basura, plásticos y hasta partes de electrodomésticos desperdigados.

Luis, el placero que realizaba la limpieza, explicó que la situación se repite con cada lluvia porque el agua baja por una zanja que viene desde la toma 7 de Mayo. Desde esa zona se comenzó a formar un río que arrastró todos los desechos que arrojan los vecinos.

El director de Defensa Civil del municipio, Raúl Ricard, explicó que el trabajo de las cuadrillas estuvo abocado a destapar las bocas de tormenta que en su mayoría se vieron afectada por la basura. Aseguró que recibieron doce llamados con pedidos de asistencia, de chapas y nailon, para evitar que el agua ingrese en viviendas precarias. Todas las llamadas fueron derivadas a Acción Social.

“El caso más complicado fue en Villa Ceferino, en la casa de una familia que tuvo ingreso de líquidos cloacales. Ayudamos a sacar los fluidos y luego asistimos con bolsas de arena para que coloquen en las aberturas”, concluyó.

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