Tiempo de tristeza y resignación

Panorama nacional: Tiempo de tristeza y resignación

Panorama nacional

Pocas veces como esta semana quedó de manifiesto la debilidad de Cambiemos. El oficialismo encadenó tres derrotas, dos en el Congreso, donde no prosperaron sus proyectos de ley contra los barrabravas del fútbol y de financiamiento de las campañas; y otra en la Corte, un cuerpo cada vez más florentino que dictaminó en favor de un reclamo sobre la actualización jubilatoria. En cambio, el fallo de la Cámara sobre el caso de los cuadernos no disgustó al gobierno: ratificó el procesamiento de Cristina Kirchner y suavizó las calificaciones penales de varios empresarios. Sin embargo, la mejor noticia que administra el gobierno en estos días es, además del dólar, la paz social. Para muchos es uno de los hechos misteriosos de fin de año. Uno de los líderes del triunvirato piquetero llegó a una conclusión inesperada al dar cuenta del fenómeno ante esta columna: “Hay tristeza y resignación”.

En Buenos Aires algunos especulan con que las temperaturas han sido en diciembre más bajas y eso favorece la paz en las calles. Para otros, contribuyó que no haya habido cortes de luz. Incomprobable. Mejor se ajusta el hecho de que el gobierno apuntaló la asistencia con un aumento en los planes (más del 30% en el segundo semestre) y un bono de fin de año, sumado al refuerzo de alimentos en las zonas más vulnerables del conurbano y los adicionales que activó la gobernadora María Eugenia Vidal. En un escenario con más de 13 millones de personas en la pobreza, el gobierno ha hecho todo esto casi en silencio. Hay un sector de su electorado, el núcleo más duro del Pro, al que considera que ofende si lo comunica mejor. Aunque hasta ahora el Fondo Monetario la promueve, allí la asistencia no paga.

Entre las curiosidades de la semana hay que mencionar que el viernes entró el desembolso de u$s 7.600 millones del préstamo del Fondo, el tercero y último del año, que llevó a las reservas a un récord, por encima de los u$s 66.000 millones. Sin embargo, ese mismo día el riesgo país –que mide el JP Morgan y traduce la volatilidad y desconfianza de una economía– llegó a 819 puntos y también alcanzó su récord en la era Macri. Y los bonos con vencimiento posterior a las elecciones del 2019 se derrumbaron. Hasta finales del año que viene, el gobierno recibirá otros u$s 22.000 millones del stand by del FMI, con los que podrá hacer frente a su necesidades financieras. Solo unos u$s 6.000 millones vendrán en 2020 y completarán el préstamo. Ese año, cualquiera sea el gobierno, la Argentina debería volver a financiarse en los mercados para cumplir con sus obligaciones de deuda. Difícilmente podría hacerlo si persisten las condiciones que le imponen hoy. Más allá del factor Cristina, la desconfianza radica en la capacidad de pago de la Argentina.

Por el riesgo país, el gobierno paró las obras financiadas con participación privada. La suspensión del proyecto de tren norpatagónico podría afectar el desarrollo a mediano y largo plazo de Vaca Muerta, reconocen en el gobierno de Río Negro. En el epicentro de la recesión, en noviembre cayó la recaudación más de un 12% y se desplomaron las importaciones. El Indec difundió los datos de octubre de consumo: se retrajo un 10% en los supermercados y un 18% en los shoppings en relación a un año atrás. “Todavía tenemos meses duros por delante”, les dijo el presidente Macri a los miembros de la Conferencia Episcopal que lo visitaron el jueves en la Casa Rosada, según un comunicado de la presidencia. En una entrevista en esta misma edición, el senador Pichetto advierte sobre cuatro meses en los que se va a sentir lo peor del ajuste en términos de consumo y empleo. Otro candidato presidencial de su mismo espacio pronostica una crisis cambiaria para marzo próximo. Desafía incluso con una apuesta.

El peronismo alternativo a Cristina Kirchner mostró una forma más compacta el miércoles en su reunión en la Casa de Córdoba. Un intendente del conurbano bonaerense que estuvo dos días antes con Cristina cree que los gobernadores no van a arriesgar nada por esa nueva construcción y buscarán hacerse fuertes en sus provincias. Pero anotó: ese espacio está creciendo.

Uno de los líderes del triunvirato piquetero llegó a una conclusión inesperada al dar cuenta del clima de paz social ante esta columna: “Hay tristeza y resignación”.

Un candidato presidencial del peronismo alternativo pronostica una nueva crisis cambiaria para marzo próximo. Desafía incluso con una apuesta.

Panorama nacional

Datos

Uno de los líderes del triunvirato piquetero llegó a una conclusión inesperada al dar cuenta del clima de paz social ante esta columna: “Hay tristeza y resignación”.
Un candidato presidencial del peronismo alternativo pronostica una nueva crisis cambiaria para marzo próximo. Desafía incluso con una apuesta.

Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios