Trastornos de conducta alimentaria: el tormentoso deseo de alcanzar el cuerpo ideal

El 2 de junio se celebra el día mundial de acción por estas afecciones. En Argentina, según datos del 2011 de la Asociación de Lucha contra la Bulimia y la Anorexia, el 37% de las mujeres entre 15 y 20 años sufre un trastorno alimentario.

Por Dra. Virginia Busnelli, (MN 110351), Médica especialista en nutrición y directora del Centro de Endocrinología y Nutrición CRENYF

Los trastornos de la conducta alimentaria son alteraciones psicológicas atadas a una fuerte preocupación en relación al peso, la imagen corporal y la alimentación, provocando alteraciones en el acto de comer, cambios o enfermedades físicas y alteración en el funcionamiento normal de la vida diaria de la persona.

Dentro de los trastornos más comunes se encuentran la anorexia, y la bulimia. Estas enfermedades afectan a 7 millones de mujeres y a 1 millón de hombres en todo el mundo. En Argentina, según datos del año 2011 de la Asociación de Lucha contra la Bulimia y la Anorexia (ALUBA), el 37 por ciento de las mujeres entre 15 y 20 años sufre un trastorno alimentario.

Si bien estas enfermedades aparecen a causa de numerosos factores (psicológicos, neuronales y socioculturales) hoy quiero hablarles de uno que sigue atormentando principalmente a los adolescentes de todo el mundo: la búsqueda o el deseo de alcanzar el cuerpo ideal.

La idea de que existe un cuerpo perfecto fue cayendo a lo largo de tiempo, todos somos distintos en cuerpo y alma. Pero, aunque esta verdad ya no es contundente y sabemos que no es real, seguimos en la búsqueda de un cuerpo perfecto, proceso que frustra y muchas veces enferma.

¿Por qué es esto? Porque hemos construido a lo largo del tiempo el concepto del “deber ser” alrededor del cuerpo, creemos que, si alcanzamos el peso y la figura de las personas que comunican en redes sociales y en televisión, seremos más felices, que eso es lo que necesitamos para estar completos. Y en esa búsqueda aparecen las famosas “dietas”, patrones alimentarios llenos de restricción bajo el mensaje de que si “cerramos más la boca” el cuerpo ideal empieza a surgir y allí está la felicidad que me falta “la belleza que duele”.

Pero el problema no está en la dieta, sino en por qué existe esa dieta, en dónde estamos poniendo el foco de mis procesos de cambio…¿en el cuerpo ideal? Muchas veces cuando sentimos que la dieta no funciona, que soy yo el que no puede hacerla, soy yo el que no tengo voluntad, cosa que no es así, entonces comienza la búsqueda de nuevas alternativas que aceleren mi proceso hacia el cuerpo que quiero, surgiendo, en muchos casos, trastornos de la conducta alimentaria.

Trabajar en cambiar nuestras verdades acerca de nuestro cuerpo, entender que somos distintos, que idealizar un cuerpo nos enferma, amarnos como somos y caminar hacia la salud y no hacia el cuerpo perfecto es necesario, pero no es fácil y requiere del trabajo profesional y la contención social.

Que el motor de cambio sea la salud, y el proceso hacia ello, sea amable con nuestro cuerpo, lento, amoroso, sin etiquetas ni deber ser.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios