Los restos óseos encontrados eran del anciano desaparecido

La Justicia informó que los restos óseos encontrados el viernes, en la ribera del río Negro, pertenecían al octogenario desaparecido en Viedma hace tres semanas.

La identificación fue posible también por el hallazgo de vestimentas, que coincidían con las que lucía Ignacio Alan, de 85 años, cuando fue visto por última vez.

Un vecino encontró el viernes restos humanos en un predio cercano a la ruta 3 Vieja, a la vera del río Negro, y la investigación fue conducida por el fiscal Pedro Puntel. Anoche, el ministerio Publico informó que “los restos encontrados serían de Ignacio Alan”. Afirmó que esa conclusión fue posible, además de aquellos indicios, por los estudios realizados por el Cuerpo de Investigación Forense sobre las piezas dentarias encontradas.

Alan fue visto por última vez en las cercanías de la rotonda de la actual y la vieja ruta 3. El último rastro correspondía a un video que lo mostraba caminando por la vera de la cinta asfáltica, en dirección al Vivero Provincial. Un testigo también dijo haberlo visto cerca del predio de la Peña Azul y Oro.

La búsqueda fue liderada por el fiscal Guillermo González Sacco, que incluyó la participación de perros de Conesa, Dorrego, Punta Alta y Cipolletti, con rastrillajes en la zona; la participación de buzos de Bomberos y de Prefectura, con búsqueda en los canales; y la utilización de drones de la Gendarmería, y un avión del aeroclub de Patagones.

Los familiares fueron San Antonio, Sierra Grande y todo lugar dónde surgiera un pequeño indicio. Ignacio sufría demencia senil y, aún una operación de cadera, se movilizaba perfectamente. Vestía camisa, sombrero y un pañuelo. Abordó ese domingo un taxi frente al barrio América y pidió que lo trasladara al campo.