Dos playas paradisíacas de Brasil para una escapada de temporada baja

Caño Cristales el río que escapó del paraíso es un lugar espectacular y único en el mundo, con una belleza natural que pocos han podido apreciar en su plenitud.

Por Redacción

08/05/2025 19:00

Arraial do Cabo, en el estado de Río de Janeiro, y la Península de Maraú, en Bahía.

Si estás pensando en hacer una escapada en mayo, Brasil puede ser el destino perfecto. Con temperaturas agradables, paisajes de postal y precios accesibles para los argentinos, este país vecino tiene joyas poco exploradas que vale la pena conocer.

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Hoy te contamos sobre dos playas que combinan tranquilidad, belleza natural y ese aire relajado que todos buscamos en vacaciones: Arraial do Cabo, en el estado de Río de Janeiro, y la Península de Maraú, en Bahía.

Arraial do Cabo: aguas turquesa, delfines y arenas blancas

Conocida por muchos como el “Caribe brasileño”, Arraial do Cabo está a solo unas horas de Río de Janeiro y es un verdadero paraíso. En mayo, fuera de la temporada alta, este destino se disfruta con menos turistas y un clima ideal para relajarse.

La ciudad forma parte de la Región de los Lagos y sorprende con su entorno natural: playas de agua transparente, dunas, colinas verdes y un ambiente pesquero muy pintoresco.

Algunas de sus playas más lindas y accesibles son Praia dos Anjos, Pontal do Atalaia, Praia do Forno, Prainhas do Pontal, y Praia do Farol, esta última solo accesible en lancha y declarada una de las más lindas del país.

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Además, si tenés suerte, podés ver delfines desde la costa o en excursiones marítimas que también permiten hacer snorkel y buceo.

Península de Maraú: playas solitarias y naturaleza virgen

A unos 240 kilómetros de Salvador, en el estado de Bahía, se encuentra esta joya escondida. La Península de Maraú ofrece 40 kilómetros de playas casi desiertas, algunas con aguas tranquilas y otras con olas ideales para surfistas.

Península de Maraú, naturaleza y playas.

Destinos como Taipu de Fora, con sus piscinas naturales, o Praia de Algodões, Saquaíra y Cassange, donde se forma una laguna dulce junto al mar, hacen de esta región un sitio perfecto para quienes buscan calma y naturaleza en estado puro. Las fases de luna llena y nueva son las mejores para disfrutar de las piscinas naturales, cuando el mar se convierte en un verdadero acuario al aire libre.

El acceso puede requerir algo de aventura: desde Salvador se toma un ferry y luego un viaje por rutas que en algunos tramos son de tierra. Otra opción más directa es volar hasta el aeropuerto de Ilhéus, que queda a poco más de 120 km de Barra Grande, la base ideal para explorar la península.

¿Por qué viajar en mayo a Brasil?

Mayo es temporada baja: hay menos gente, los precios bajan y el clima sigue siendo agradable, especialmente en el litoral norte. Es la oportunidad perfecta para disfrutar del país sin multitudes y con una mejor relación precio-calidad.