La Lobería, una joya en el Camino de la Costa: playa, piletones naturales y reserva de lobos
Está ubicada a 60 km de Viedma, dentro de la Reserva Faunística de Punta Bermeja. Se llega por la ruta provincial 1, que por largos tramos corre pegada al mar y es una de las más lindas de la Patagonia. Hay confitería, food track, hostel, camping y carrito elevador para acceder a la playa.
Los piletones naturales, todo una postal de La Lobería, en la costa de Río Negro al norte de la Patagonia.
A 60 kilómetros de Viedma, por la ruta Provincial N° 1, se ubica La Lobería con sus tradicionales playas de arena y diminutas piedras, y numerosos piletones naturales al abrigo del típico acantilado patagónico.
El lugar está ubicado dentro de la Reserva Faunística de Punta Bermeja, creada en 1971 por el decreto provincial N° 898 y que cuenta con una superficie de 2.100 hectáreas, 600 continentales y 1.500 marinas.
Es el refugio elegido, cada vez más, por residentes en la Comarca Viedma y Patagones para disfrutar de un día de playa, un sitio muy recomendable para los turistas, en tanto que se está convirtiendo en una clara opción para quienes pueden construir cerca del mar porque la villa muestra un gran avance con numerosas construcciones.
La cautivante belleza del lugar tiene su contratiempo y es acceder a la playa. Una extensa bajada, con una marcada pendiente; de cemento y algunos escalones son todo un desafío que hay que tomar con calma. Mucho más difícil es la subida, pero está la alternativa del carro elevador a cargo del concesionario del lugar, que funciona sin pausa hasta las 20 de cada día con un costo de 200 pesos por persona.
El vehículo funciona desde la década del 90, con algunas interrupciones para su reparación, luego que fuera una creación de un grupo de alumnos de la Escuela Industrial de Viedma para una feria de ciencias del establecimiento.
Sobre el acantilado el predio también cuenta con baños y una confitería, además de un sector de estacionamiento cubierto, con un costo de 400 pesos la estadía.
Está otra vez en funcionamiento el cámping que fue concesionado por el municipio, luego de su refacción, a empresarios locales que ofrecen los servicios de acampe y hostel, además de una proveeduría que funciona todos los días de 9 a 24 y un Foodtraks.
Para el acampe hay 7 parcelas con fogón individual, luces y toma corriente a un costo de 1.200 pesos por día y de 500 pesos para menores de seis años. Por única vez se abonan 1.000 pesos por carpa, 500 por vehículo, 1.500 por casilla y 2.000 por motorhome.
El hostel tiene seis plazas distribuidas en tres habitaciones con equipos de aire (frío/calor), baño, cocina y comedor de uso común, heladera con freezer y cocina eléctrica y el precio es de 3.500 pesos por persona (no incluye ropa de cama).
Desde fines del año pasado nació otra posibilidad para esa zona con la organización del primer Encuentro de Turismo Energético Consciente organizado por la Cámara de Comercio, Turismo, Industria y Producción de Viedma; el municipio local y el área de Turismo de la provincia. Una idea que busca instalarse con el paso del tiempo para quienes buscan distintos destinos motivados por la energía y la espiritualidad del entorno para realizar actividades de relajación y meditación.
La Reserva a unos pasos
A escasos tres kilómetros del balneario y la villa marítima se ubica el Centro de Interpretación Faunística que depende de la Secretaría de Ambiente y Cambio Climático de la provincia y funciona desde 1980.
Allí se puede apreciar la colonia de lobos marinos de un pelo más grande de Sudamérica con casi 8.000 ejemplares y en esta epoca del año las hembras se encuentran en la etapa de parición. Durante el invierno la llegada de numerosas hembras con sus crías de otras zonas patagónicas aumentan la población hasta unos 12.000 individuos.
Además de observar los lobos desde distintos miradores ubicados sobre los acantilados se pueden conocer detalles de esos ejemplares y de otros animales, en especial aves, que habitan en la reserva a través del trabajo de los guardas ambientales que prestan servicios en el lugar.
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