La actividad ganadera, con buenos indicadores

Indicadores positivos se observan sobre la actividad ganadera de Río Negro y Neuquén en lo que va del presente año.

La estadística oficial detalla que el nivel de faena creció en cada una de las categorías y la unificación del status sanitario para toda Patagonia comenzó a mostrar los primeros signos positivos. Según un reciente informe elaborado por el Senasa, cerca de 10.000 cabezas de ganado bovino se desplazaron para la venta desde las tierras de la región hacia el sur de la Patagonia en estos primeros tres meses del año. Esta cifra representa un crecimiento interanual en el comercio del orden del 580%.

El año pasado se habían comercializado hacia ese mercado sólo unas 1.500 cabezas que habían salido de explotaciones ubicadas en Neuquén (a excepción del departamento Confluencia) y el sur del río Negro, zonas que mantenían en ese entonces el mismo status sanitario que Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego. Cabe destacar que este nuevo movimiento de hacienda hacia el sur va para invernada y faena con frigoríficos en la zona de Trelew y establecimientos en Esquel, Comodoro Rivadavia y Río Gallegos.

En definitiva, se observa una importante recuperación del sector ganadero. Este escenario se da, entre otras, por dos causas bien definidas. La primera de ellas es la que se mencionó párrafos arriba con la unificación del status sanitario para toda la Patagonia, lo que permitió ampliar el comercio de Río Negro y Neuquén hacia zonas pobladas del sur. La segunda ha sido el buen estado de los campos en el norte de la Patagonia producto de una mayor cantidad de pasto por los buenos registros de lluvia que se tuvo en el último año.

Pero no todas las actividades (bovinos, cerdos y ovinos) mostraron una misma tendencia. Inclusive dentro de cada una de ellas hay sectores más beneficiados que otros.

• Ganadería bovina. Los estudios del Senasa reflejan que el comercio ganadero mostró un positivo desarrollo en esta primera parte del año. La venta de hacienda desde la región hacia el sur de la Patagonia se sextuplicó en los primeros tres meses del 2017 y la faena en los establecimientos de Río Negro y Neuquén creció en un promedio de algo más de mil cabezas por mes. La mayor oferta de hacienda al mercado se da en un contexto con buen desarrollo de campos, lo que permitió tener una mayor carga por establecimiento, y la aparición de feed lot en toda la región. Pero los márgenes de rentabilidad para muchos sectores no crecieron. Este es el caso de la industria que faenó más hacienda pero con menores niveles de rentabilidad. Según fuentes allegadas a los sectores frigoríficos, “los valores de la hacienda en pie subieron, pero estos mayores costos no se pudieron trasladar a las góndolas ya que el consumo está en baja y el temor que existía era que si se incrementaban los precios la caída podía llegar a ser mayor”. En toda la cadena del sistema ganadero bovino existieron en estos últimos meses dos grandes ganadores. Uno de ellos fue el productor que pudo hacer valer la hacienda a la hora de negociar con la industria o de vender hacia los campos del sur de la Patagonia. El otro fue el consumidor que vio crecer tan sólo 5% el valor de la carne en góndola en el último semestre contra una inflación superior al 20%. Independientemente de este último dato hay que resaltar que desde diciembre del 2015 a la fecha el precio de la carne en los negocios minoristas casi se duplicó, lo que definió una sensible caída en el consumo, que es lo que se sigue viendo en estos días.

• Ovinos. El comercio de hacienda en estos primeros tres meses del año trepó a las 23.904 cabezas, cifra que representa un salto interanual del orden del 66%. Sin dudas es un dato muy alentador para el sector. Las causas de este buen momento de la actividad están fundamentadas por la mayor oferta de forraje existente en los campos de la región, a lo que se le suma la política provincial de repoblamiento de ovinos llevada adelante por Río Negro, que dio un gran respiro al productor. Por otra parte la estadística señala que poca ha sido la oferta de ovinos (unas 300 cabezas) que fue destinada al sur de la Patagonia.

• Cerdos. La faena de este tipo de animales no mostró el crecimiento proyectado. El buen momento de la industria del cerdo en estos últimos años y las inversiones realizadas en toda la región norte de la Patagonia proyectaban para esta primera etapa un mayor nivel de comercio de lo que verdaderamente muestran las estadísticas oficiales. En este sentido el Senasa destaca que durante el primer trimestre del año en curso se faenaron en Río Negro y Neuquén 15.455 cabezas, cifra que muestra un crecimiento interanual del 7%. Desde el sector industrial aseguran que la región no cuenta todavía con establecimientos que puedan sostener una escala de faena adecuada que permita el desarrollo sostenido de la actividad. Otra de las variables que no acompañó las expectativas de faena para este año fue la falta de seguridad jurídica a la que está sometida toda la industria del cerdo por falta de definiciones clave a la hora de comercializar el producto. Hay que recordar que hacia fines del año pasado el Senasa autorizó el ingreso de carne de cerdo proveniente de explotaciones e industrias ubicadas al norte de la barrera del río Colorado, lo que generó mucho malestar en la región de la Patagonia. Pero días después la Justicia aceptó un amparo que volvió todo a foja cero y solicitó 90 días para definir la problemática. Los plazos, en principio, ya estarían vencidos pero no hay definiciones sobre cómo continúa el comercio de carne de cerdo en la región. Un tema que es clave para cualquier inversor que quiera colocar fondos para el desarrollo de esta actividad en la región.

Temas pendientes

Uno de los temas que queda todavía pendiente de profundizar en toda la región es el control comercial y sanitario de la actividad ganadera en todas sus facetas. La venta de hacienda o sus subproductos muestra serias e importantes irregularidades en materia fiscal. Muchas son las empresas y productores que terminan evadiendo o eludiendo sus responsabilidades impositivas, y genera incertidumbre frente a potenciales inversiones que quieran acercarse a la región. La falta de seguridad jurídica y la competencia desleal a la hora de evaluar costos y tributos a pagar está impidiendo hoy cualquier desarrollo sustentable del sector.

Sería importante que tanto los gobiernos provinciales como el nacional comiencen a tomar cartas en el asunto.

“La opción de enviar hacienda al sur de la Patagonia es positiva porque equilibra el mercado en todo el territorio”.

Tabaré Bassi, secretario

de Agricultura y

Ganadería de Río Negro.

“Con el fin de la barrera ganamos los productores, la industria, y los consumidores no vieron afectados los precios”.

Luis Iribarren,

presidente de la Sociedad Rural de Viedma.

Dato I

Dato II