Nueva asamblea contra la instalación de la central nuclear

Nueva asamblea contra la instalación de la central nuclear

Una nueva asamblea popular se desarrolló ayer por la tarde en la Catedral viedmense para rechazar la instalación de una central nuclear en la costa atlántica rionegrina, tal como impulsan los gobiernos nacional y provincial a través de un acuerdo suscripto el mes pasado entre Argentina y China.

Durante el encuentro se resaltó la acción gubernamental de llevar a periodistas de distintos medios -entre ellos DeViedma– a recorrer la planta de Atucha. “Esta semana tuvimos dos noticias, por un lado que el gobierno llevó a los medios de visita a la planta de Atucha para que informen las bondades de este proyecto y convenzan a la población y, mientras eso pasaba, nos enterábamos de 800 despidos en esa central, lo que demuestra que es verso que vaya a generar trabajo”, dijo el padre Luis García, al abrir un nueva reunión que colmó la iglesia.

El sacerdote consideró que la lucha en contra de la iniciativa gubernamental es “como la de David contra Goliat”, pero pidió no bajar los brazos.

Por su parte, otros de los impulsores de la convocatoria en rechazo a la propuesta resaltaron la necesidad de informarse sobre las características, el funcionamiento y los perjuicios que provocaría una central atómica en la zona.

“Debemos estar informados para que si llega a concretarse la consulta popular podamos dar los argumentos claros”, indicó una de las jóvenes que motoriza las concentraciones populares en la Catedral.

Además, se informó que la asamblea se está organizando en comisiones y que ya hay varias trabajando en cuestiones de diseño, arte, generación de un logo y temáticas jurídicas.

En ese sentido, Miguel Ciliberto, uno de los participantes, insistió con la necesidad de apoyar los proyectos de ley existentes en la Legislatura que exigen el llamado a consulta pública vinculante. Por otro lado, leyó el borrador de lo que podrá ser un amparo en la Justicia para evitar que avance el proyecto hasta tanto se lleve a cabo el llamado a la participación popular para que la ciudadanía se exprese.

Varios de los oradores de ayer hicieron mención a la visita de medios de prensa concretada el viernes, a instancias del gobierno provincial y nacional, a la planta de Atucha y destacaron que también en las escuelas se está informando acerca de los beneficios de la instalación de una central en la zona.

En tanto, se distribuyó en el ingreso a la catedral una ordenanza de 1991 del Concejo Deliberante de Viedma que declara al Municipio de Viedma como zona no nuclear. También se entregó una cartilla explicativa del funcionamiento y los perjuicios de una planta atómica.

Central nuclear: todavía no se definió su ubicación

(Enviado especial) “No hay definición de la localización” de la central nuclear de Río Negro, afirmó el subsecretario de Energía Nuclear de la Nación, Julián Gadano. Así, relativizó todas las especulaciones de lugares planteados recientemente mientras sólo reiteró que “será en la zona atlántica” y que aún se cumplen con estudios previos para su definición en los próximos meses.

Gadano, conjuntamente con el gobernador Alberto Weretilneck, encabezó ayer una recorrida por las centrales de Atucha, acompañados por una veintena de periodistas rionegrinos -entre ellos, DeViedma– que fueron invitados para ofrecerle información, mostrar las instalaciones y, esencialmente, ratificar las “ventajas” de la energía nuclear frente al anuncio de la planta por construir en la costa rionegrina, a partir de 2020.

En Nación hay conocimiento de las reacciones críticas planteadas esencialmente en Viedma. El funcionario nacional admite que es obligación gubernamental acercar información técnica para llevar tranquilidad a la sociedad en referencia a las plantas nucleares.

A Gadano lo acompañó el presidente de Nucleoeléctrica Argentina SA (NASA), Omar Semmoloni, entre otras autoridades de esa compañía estatal, generadora de energía eléctrica con sus tres centrales, Atucha I y II y Embalse. También participaron miembros de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) mientras que Weretilneck llegó con los secretarios Dina Migani (Medio Ambiente) y Juan Pablo Espíndola (Minería).

El mandatario fundamentó la presencia provincial frente a la necesidad de disponer de la mayor información técnica posible para abordar el debate de la instalación en Río Negro. Además, resaltó que no hay apuro porque “todavía queda tiempo”, recordando que recién a fin de año se estarán firmando los contratos definitivos con las empresas chinas.

La visita a Atucha -que comprenderá un próximo despliegue periodístico- incluyó distintas charlas de científicos y, también, el recorrido por sus centrales, incluyendo demostraciones de situaciones en los simuladores de salas de operaciones, y por las instalaciones del prototipo del primer reactor nuclear argentino Carem 25.

En referencia al proyecto en Río Negro, Gadano relativizó toda definición de la localización. Negó cualquier especulación de plazos, asegurando que los estudios con informes previos y en campo no concluyeron para su definitiva resolución del lugar, que si “será en la zona atlántica”.

Obviamente, las consultas periodísticas en diferentes ocasiones se concentraron en los residuos, a lo cual, el subsecretario y miembros de NASA reiteraban que “el combustible gastado (uranio) no lo es” porque existe de la posibilidad de su reutilización” aunque admitieron que en el país “aún no se los usa” y “se los depositan inicialmente en grandes piletas” para después, “en un tiempo”, resguardarlos en un lugar seco, actualmente en construcción en Atucha.

Las plantas de Atucha están ubicadas en Lima, cerca de Zárate (Buenos Aires), y ocupan a unas 1.200 personas. La primera, llamada Juan Domingo Perón, fue puesta en marcha en 1974 y la segunda, denominada Néstor Kirchner, genera desde 2016.