“Sobre los Reyes Magos”

Una de las fiestas tradicionales de la cristiandad es cuando los tres reyes, o sea magos persas, venidos del Oriente siguiendo el curso de una estrella de características extraordinarias traen sus presentes de oro, incienso y mirra al Niño Jesús que reposaba en un humilde pesebre del villorrio de Belén –la ciudad del rey David– porque para él no había lugar en el mesón, o sea la posada de aquellos tiempos para los viajeros y las caravanas.

La tradición agrega los nombres de Gaspar, Melchor y Baltasar (de piel negra) pero el relato bíblico de los evangelios nada dice de esto. Sí que previamente se reunieron con el rey Herodes, a la sazón rey de Israel con el amparo del Imperio romano.

La literatura y los cancioneros son profusos con respecto a los Reyes Magos y muchos poetas dejaron bellísimos textos sobre su misión de paz, entre ellos Rubén Darío, Amado Nervo y tantos otros.

El poeta malagueño Carlos Benítez Villodres escribió un hermoso soneto dedicado a los tres sabios que rindieron adoración al Niño Dios:

“Los Reyes Magos nos traerán un cielo/de amor con la palabra que nos guía/Dios, Padre Omnipotente, por la vía/de su verdad con sones de consuelo. Una estrella organizará un revuelo/por los campos de oro y de alegría/por donde, con tesón, la noche fría/arropará a Jesús con terciopelo. En Paz Cristo se duerme rodeado/de reyes y pastores de alma entera/al calor de una hoguera floreciente. El Niño Dios nos dona su legado/de vida santa, en dulce primavera, para un mundo que olvida su simiente”.

Jorge Castañeda

DNI 8.569.045

Jorge Castañeda

DNI 8.569.045


Adherido a los criterios de
Journalism Trust Initiative
<span>Adherido a los criterios de <br><strong>Journalism Trust Initiative</strong></span>

Nuestras directrices editoriales

Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios