Asesinato en el barrio Lavalle: Buscan a un tercer partícipe

Wálter Alejandro Porcel, de 21 años; fue imputado por «homicidio en ocasión de robo» por el asesinato de Braian Reyes, de 19; ocurrido el pasado martes en Viedma en el marco de un fallido Cuento del Tío, según la acreditación realizada por el Ministerio Público Fiscal durante la audiencia de formulación de cargos realizada este sábado.

Ambos jóvenes fueron identificados por el fiscal Juan Pedro Puntel, quienes quisieron perpetuar la estafa contra José Luis Quintana y Rubén Omar Palma, que llegaron desde Bahía Blanca para comprar un vehículo.

Además, Puntel confirmó que se busca a una tercera -no identificada todavía- partícipe del intento de estafa, quien llevó adelante los contactos con los bahienses por la presunta venta de un rodado y los direccionó hacia Viedma. Cuando aquellas cuatro personas se encontraron en la esquina de las calles 30 y 9 del barrio Lavalle se produjo un intento de robo y un enfrentamiento a tiros que terminó con la vida de uno de los agresores y uno de los compradores con una herida de bala en la pierna izquierda.

La audiencia fue presidida por el juez de garantías de turno Fabio Corvalán a través de una video conferencia ya que su lugar de funciones es en San Antonio Oeste.

Los representantes del Ministerio Público indicaron que entre las primeras evidencias cuentan con el testimonio del papá del joven fallecido, un testigo que ubica a los jóvenes en el lugar del hecho y aportó una fotografía, y los informes preliminares de la autopsia y de la Oficina de Investigación de Telecomunicaciones, encargada del peritaje de teléfonos celulares que confirman la existencia de contactos anteriores para la compra del vehículo.

Todavía restan diferentes pericias y la localización de más testigos, algunos de los cuales no quieren declarar «por temor», por eso la fiscalía pidió como medida cauletar la detenicón de Porcel por cuatro meses, tiempo solicitado para completar la investigación.

Para los fiscales la pena en expectativa para este delito «es una sanción mayor a los tres años de prisión» por eso «de recaer una condena posiblemente sea de cumplimiento efectivo» y extendieron que «existe un riesgo procesal previsto por la normativa» y aludieron al «entorpecimiento de la investigación» porque si está en libertad «Porcel va a menoscabar el libre desarrollo de esta investigación» y «va a impedir y alterar el libre testimonio de los testigos» de los que ya declararon y de otros «que estamos buscando, porque nos consta que hay más».

A su turno la defensa oficial compuesta por Marta Ghianni y el adjunto Adrián Zimmermann no realizó ningún planteo contra los cargos y los elementos presentados por la fiscalía pero se opuso a la medida cautelar de cuatro meses, al entender que Porcel «se entregó voluntariamente», que «no hay pruebas contra mi defendido», recordó que sufrió la pérdida de un amigo y «un mes» de prisión preventía «sería un término razonable» dijo Ghianni.

Para el juez Corvalán fueron acreditados los hechos, como así también aceptó los elementos con que cuenta la investigación hasta el momento y, además, hizo lugar al pedido de la prisión preventiva porque «la fiscalía demostró indicios suficientes que el imputado va a entorpecer esta investigación» y determinó su traslado al Penal N° 1 de esta capital.