Chicos de Choele limpiaron calles, por el bien común
Cerca de 70 chicos de diferentes edades, provistos de guantes y bolsas, realizaron una prolija recolección de residuos a lo largo de más de diez cuadras. La propuesta fue de la iglesia central.
«Porque la solidaridad no es sólo una cuestión de compasión», sostuvo el padre Mario Ibarra, de la iglesia del centro de Choele Choel, promotor de la movida.
Pasadas las 10 de la mañana de ayer, y a pesar del frío que se apoderó de la comarca, decenas de chicos con las manos enguantadas pasaron por la calle Avellaneda, recogiendo residuos de todo tipo. Desde un altavoz, instalado en un FIAT 600, se daba a conocer el porqué de la medida que tuvo como principal objetivo la preocupación por el prójimo en el sentido de que no sólo pasa por ser solidarios cuando se necesita, en situaciones difíciles, sino preocuparse por el bien común, por los problemas comunes que enfrenta cada sociedad.
El operativo
Por más de diez cuadras, los pibes fueron guardando en bolsas la basura, que después se depositó en un sitio cerca de la iglesia, para su posterior traslado al basurero.
El padre Mario explicó «muchas veces llegamos a la solidaridad a través de la compasión como por ejemplo cuando le sucede un accidente a alguien, o por ejemplo si hay una inundación, entonces allá vamos todos a colaborar. Eso no esta mal, esta bien. Pero en lo ordinario de todos los días esas cosas que hacemos por compasión después no se ven reflejadas.»
«Es decir –agregó– que ustedes siguen siendo mi prójimo aunque no les pase nada. Y hay cosas que todos necesitamos, que es lo que se llama el bien común. Entonces nosotros ahora proponemos un gesto, a partir de algo que todos necesitamos que es muy simple: todos necesitamos una ciudad limpia. Que no es que esté muy sucia, pero lo usamos como símbolo».
«La clave es que hay cosas importantes que nos interesan a todos. Estas necesidades no tienen que ver con nuestro color político, ni nuestra religión. Por eso hay que privilegiar entre los valores el bien social y el bien común.» sostuvo.
«Esto es simplemente un gesto, un símbolo, preparativos para la pascua. Sobre todo porque debemos tener gestos, todos, donde se piense en el otro. Como por ejemplo no ensuciar la ciudad -indicó Ibarra-. No podemos poder pensar únicamente en nosotros».
La jornada de limpieza, previa a las pascuas, se repetirá los próximos años, así lo mencionaron desde la iglesia Sagrado Corazón de Jesús.
Pero se tiene pensado sumar a más chicos a la iniciativa. Así el año que viene se invitará a las escuelas y para el 2005 la idea es convocar a otras instituciones comunitarias, como clubes o juntas vecinales.
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