Conmebol: la pelota no se mancha

Neuquén

Me gusta el fútbol: soy hincha del Racing Club de Avellaneda desde que nací. Como espectador de los partidos jugados entre Boca Juniors y Atlético Minero, puedo expresar libremente mi opinión, desde un punto de vista imparcial y neutral.


En el juego del martes en el Estadio Mineirão, el gol del futbolista Marcelo Weigandt, fue mal anulado. Lo mismo sucedió en el partido de ida, cuando los Xeneizes (jugando de local) abrieron el marcador por intermedio del jugador Diego Hernán González.


En aquella oportunidad, el árbitro le anuló un gol legítimo al conjunto dirigido por Miguel Ángel Russo. Mucha es la gente que opina que lo del martes en Brasil fue un robo. En lo personal, creo que dicha situación la calificaría como “una estafa devenida en fraude”; pues a los bosteros no solo le quitaron la gloria deportiva de pasar a cuartos de final, sino que además lo perjudicaron económicamente, al no poder percibir el millón y medio de dólares que le hubiera correspondido por pasar a la siguiente instancia de la Libertadores 2021. En La Copa Conmebol el fútbol ha dejado de ser un deporte. Ahora es un negocio de dudosa transparencia. Los cotejos estuvieron empañados en jugadas mal arbitradas y dirigido por personas ineficientes. El arbitraje y los encargados del manejo del VAR, dejaron mucho que desear.


La conocida CSF premia con inmensas cantidades de dinero a los clubes que clasifican a una siguiente ronda, pero han dejado de priorizar a la pelota como factor principal de este deporte.


Los enredos y embrollos en medio de ambos cotejos, quedaron claramente a la vista de todos los que apreciamos y conocemos del balompié. Pareciera ser que las grandes sumas “de la divisa estadounidense” que se les otorga a los ganadores, es para premiar a ciertos clubes “que se eligen a dedo”. Y están dispuestos a todo tipo de trampas para lograr su cometido. Por lo sucedido en ambas confrontaciones, bien podría usarse la célebre frase de uno de los mejores futbolistas argentinos que vistieron la camiseta número 10.


Señores de la Conmebol : ¡La pelota no se mancha! Firmado: Diego Armando Maradona.
En resumen: en el actual torneo, toda actitud indecorosa vale… ¡Menos el gol!


Hugo Modesto Izurdiaga
DNI 11.604.534


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios