De Tato Bores a Osvaldo Soriano

Cipolletti

En este tiempo tan complicado que vivimos los argentinos, no abundan análisis serios y claros que nos ayuden a los ciudadanos comunes a entender la realidad.

Tal vez estén haciendo falta quienes, usando el humor y el grotesco, al estilo Tato Bores con sus desopilantes monólogos o al Osvaldo Soriano de sus “llamada Internacional” de Página 12, nos pudieran dar una mirada más realista de este bodrio en que se ha convertido la política criolla. Y recordando sus trabajos nos preguntamos cómo analizarían ellos el funcionamiento de nuestra exótica economía actual, donde seis de cada diez habitantes reciben un cheque del Estado; donde la moneda argentina vale tan poco, que solo sirve para compras menores en verdulerías o almacenes pero cuando se trata de inmuebles o vehículos o tarifas hay que hablar de dólares con la particularidad, además, de que tenemos quince tipos: oficial, solidario, blue, contado con liqui, mayorista, importador, dólar soja, dólar cereal, cereza, mep, cripto, dólar puré, dólar Netflix y hasta Vaca Muerta…

O cómo explicarían el absurdo de que el presidente pontifique acerca de que el mérito es irrelevante y carece de valor en la vida de las personas, o cómo despotrica contra lo que llama la opulencia de la Capital, que agrava la brecha que manifestó estar dispuesto a cerrar.

O que la vicepresidenta, que nunca se preocupó por la pandemia, se ufana y logra a través del Senado que maneja, cambiar los jueces que la juzgan por presuntos delitos de corrupción. O que quien no le entrega a la Afip impuestos retenidos sea premiado con facilidades de pago…

O que el ministro de Seguridad Berni diga que muchos de los policías en huelga consumían drogas o alcohol. O que el gremio docentes de CABA impida darles clase a 6.500 alumnos sin acceso a Internet…

Estas situaciones serían motivo para que tanto Tato como Soriano se regodearan y plasmaran desopilantes notas que nos harían reír si no fuera porque estamos viviendo una de las peores y mas dramáticas épocas de nuestra historia.

Carlos Segovia
DNI: 7.304.065