Gasoducto a Vaca Muerta: de qué se tratan las obras por las que Massa acordó un crédito millonario
El paquete no consiste solo en un gasoducto, sino en una serie de pequeñas obras que harán que el gas de Vaca Muerta llegue por primera vez hasta el límite de Tucumán. Los trabajos permitirán gambetear otra obra troncal que aún no comenzó y llevar gas a las provincias del NOA que enfrentan una crisis de abastecimiento para el invierno que viene.
Si bien los recientes anuncios realizados por el gobierno nacional sobre el financiamiento para obras de trasporte de gas en el país son una excelente noticia, entender de qué obras se trata en cada caso es una tarea casi titánica. Pero en este artículo explicaremos en qué consisten los trabajos que se harán con los fondos del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), cuáles serían financiado con la tarifa del servicio y cuáles aún aguardan fondos.
A mediados del año pasado el gobierno a través de Enarsa licitó y adjudicó el tramo 1 del gasoducto Néstor Kirchner que va desde Tratayén, en Neuquén, a Salliqueló, en Buenos Aires. Esta obra está en marcha y tiene como fecha prevista de inauguración el 20 de junio próximo, aunque su puesta en marcha podría demorarse un poco.
Esta línea llevará más gas desde Vaca Muerta a Buenos Aires, a razón de 11 millones de metros cúbicos en un inicio y 24 millones de metros cúbicos cuando se finalicen las plantas compresoras. Este gas tendrá como objetivo central reducir las importaciones de GNL (gas natural licuado) y gasoil que el año pasado se dispararon por las nubes, pero no implicará que el país deba dejar de importar gas.
Mientras esa obra avanza surgió un problema en otro punto del país: la caída de la producción de Bolivia llevó a que este año el vecino país pactara enviar un 60% menos de gas a las provincias del Noroeste (NOA), y podría directamente no darles gas el año que viene. Algo que anticipamos en esta nota.
El gran problema es que, aunque se termine en tiempo récord el gasoducto Presidente Néstor Kirchner, las líneas no permiten que el gas de Vaca Muerta llegue al norte del país. Hoy el punto más al norte al que llega el gas de la Cuenca Neuquina es Córdoba. Es decir, hoy el gas de Vaca Muerta solo puede llegar al centro de Argentina.
Las obras que están por comenzar
Precisamente allí es donde se focalizan las obras que el ministro de Economía, Sergio Massa, anunció ayer que contarán con un crédito de 540 millones de dólares del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF). Y que además se complementan con otras obras que Transportadora Gas del Norte (TGN) realizará en el mismo sector si, finalmente, se avala el plus de tarifa que solicitó para realizarlas y que fue contemplado en la reciente Resolución 17/2023 de la Secretaría de Energía.
Vayamos por parte. La semana pasada la la Secretaría de Energía dio el visto bueno al plan de TGN para contar con una tarifa adicional del 15% que le permita financiar la reversión de dos plantas compresoras.
Se trata de las plantas de Leones y Tío Pujio (marcadas en el mapa de arriba) que lo que permitirán es llevar gas a esa zona desde San Jerónimo, es decir desde el sistema troncal de Buenos Aires donde se cuenta además con la inyección de GNL del puerto de Escobar.
La estimación es que podrán inyectarse unos 3 millones de metros cúbicos por día, un volumen que no es mucho pero casi igual a los 4 millones de metros cúbicos que enviará Bolivia este año en los meses templados.
Qué financiará el crédito
La reversión en el sentido en el que circula el gas que hará TGN queda entonces en Córdoba. Allí es donde empalma el anuncio del financiamiento que realizó el ministro Massa con la CAF. Las obras que el organismo financiará -en marzo se firma el acuerdo- tienen dos partes.
La primera parte es la reversión de otras cuatro plantas compresoras del actual Gasoducto Norte. Este sistema troncal trae en la actualidad el gas desde el norte del país, hacia el centro. Más precisamente, trae gas desde Bolivia que se importa y que es que ya entró en la época de vacas flacas.
Las plantas compresoras que se revertirán son cuatro: Ferreyra, Dean Funes, Lumbreras y Lavalle. En tanto que también se realizará un acondicionamiento en la planta de Tío Pujio. Estos trabajos lo que permitirán es que -al fin- el gas que se extrae en Vaca Muerta pueda finalmente llegar hasta la planta de Lavalle que se emplaza en el límite casi de Santiago del Estero y Catamarca, y muy cerca del inicio de Tucumán.
De allí, hasta el límite con Bolivia no se han anunciado aún obras, por lo cual ese tramo que abarca a Tucumán, Salta y Jujuy, aún seguiría recibiendo gas desde Bolivia.
La segunda gran obra que contempla el acuerdo con la CAF es un nuevo gasoducto en Córdoba, que irá desde La Carlota hasta Tío Pujio. Esta línea tendrá una extensión de 120 kilómetros y se realizaría con ductos de 30 pulgadas ya que el objetivo es llevar mucho más gas de la red de Centro Oeste -un gasoducto troncal que comienza en Vaca Muerta- hasta el nuevo nodo de Tío Pujio desde donde se distribuiría hasta el límite con Tucumán.
Estos trabajos permitirían en conjunto sumar cerca de 10 millones de metros cúbicos al sistema ubicado al norte de Córdoba y al sur de Tucumán. Si bien es un buen volumen, la forma del Gasoducto Norte que es más angosto en Córdoba que en Salta, impide una expansión aún mayor del volumen a llevar, en especial si se tiene en cuenta que el norte argentino tiene un consumo diario promedio de 12 millones de metros cúbicos de gas.
Es que precisamente, este complejo de obras recién tendría un volumen considerable una vez en operaciones el Gasoducto Néstor Kirchner, y podría alcanzar los 19 millones de metros cúbicos por día.
No es una red para exportaciones
Si bien desde el ministerio de Economía se destacó que esta obra permitiría ampliar las exportaciones a Chile y Brasil en realidad de lo que se trata es casi de una obra de emergencia para sortear el golpe que implica para el norte del país la falta de gas boliviano que todos los días del año se importa desde el 2006.
Es una suerte de gambeteada al tramo 2 del gasoducto Néstor Kirchner, una obra no solo mucho más costosa, por más de 1800 millones de dólares que aún no tiene el financiamiento asegurado, aunque se haya mencionado un posible aporte del BNDES- sino que además demandará mucho más tiempo de construcción, sobre todo si se demora su financiamiento.
A futuro, ya con el segundo tramo del gasoducto Néstor Kirchner que permita llevar al nodo de Tío Pujio más gas, y en especial con la reversión del resto del tramo del Gasoducto Norte hasta la frontera con Bolivia, sí se podrán incrementar las exportaciones a toda la región a través de las líneas internacionales que ya existen.
De momento, la obra a financiar por la CAF es clave para el invierno del año que viene, y en la industria aseguran que si se apuran los trabajos y no se registran problemas con el aprovisionamiento de los caños, el nuevo sistema podría estar listo para abril del año que viene.
De lo contrario, la alternativa será la importación de otro tipo de energéticos que permitan morigerar la falta del gas boliviano, ya sea más gasoil para las usinas o más energía eléctrica importada, dado que sin estas obras no hay forma de enviar más gas argentino a ese sector del país.
Comentarios