Escrache en El Hoyo por presuntos casos de trata de personas

EL HOYO (AEB).- Un grupo de militantes sociales fue el sábado hasta la casa del intendente Mirco Szudruck, donde pintaron el cordón de la vereda, panfletearon el patio y gritaron consignas en su contra, tratándolo de “cómplice” de los empresarios acusados en una causa por posible trata de personas y prostitución, que investiga el juzgado Federal de Bariloche sobre un complejo de cabañas del Sindicato de Petroleros Privados. En el domicilio sólo hallaron a la hija y al nieto de cuatro años del jefe comunal, quienes le avisaron de lo acontecido. Este llegó cuando los manifestantes ya se retiraban y mantuvo con ellos un cruce verbal que no pasó a mayores. Cabe recordar que el 10 de marzo fueron rescatadas dos mujeres (una menor de edad) del obrador del sector La Catarata, sospechadas de ejercer la prostitución contra su voluntad, quienes quedaron bajo custodia de profesionales de la Oficina de Rescate y Acompañamiento a Personas Damnificadas por el Delito de Trata de Personas, que llegaron desde Buenos Aires. En el mismo operativo de Gendarmería Nacional también se identificó a trabajadores de nacionalidad paraguaya, peruana y boliviana, además de otros argentinos, varios de los cuales “no tendrían su documentación en regla”, según trascendió. Ayer el propio Szudruck resaltó que “nunca le cerré la puerta a nadie, fui el primero en denunciar los hechos y pedir que se investigue”. Agregó que “siempre estoy dispuesto al diálogo, pero esta gente jamás me pidió una entrevista o una opinión”. De la convocatoria organizada por la Asamblea Permanente de Derechos Humanos participó un centenar de personas, donde se acordó “un enérgico repudio al hecho sucedido y la puesta en marcha de acciones que permitan la más amplia difusión del tema y el esclarecimiento de los verdaderos responsables” de la causa judicial en marcha. Asimismo, lanzaron una nueva convocatoria para el sábado venidero, a las 17, en la plaza Antiguos Pobladores, de El Hoyo. Sobre los hechos de violencia registrados frente a su vivienda, el jefe comunal recordó “la sarta de insultos que se escuchaban por debajo” y que “no es la mejor forma de invitarme a participar de una asamblea, como ellos dicen”. En coincidencia, ayer el Concejo Deliberante aprobó por unanimidad “repudiar enérgicamente la agresión de la que fue víctima el intendente y su grupo familiar en su domicilio particular”. En términos similares, desde la dirección del hospital local aclararon que “si bien repudiamos la trata de personas, no se convocó a ninguna marcha el próximo sábado”, como los incluye el comunicado de la APDH. En tanto, el juez federal Leonidas Moldes aún no resolvió la situación procesal del único imputado hasta el momento, quien sigue detenido en San Carlos de Bariloche.