Estos son los efectos que genera la cúrcuma en tu corazón
Contribuye a reducir la inflamación, mejorar la circulación sanguínea y regular los niveles de colesterol. Cuál es la dosis recomendada y cómo potenciar sus beneficios.
Cada vez más personas buscan incorporar ingredientes naturales en su dieta diaria para mejorar su bienestar. Entre ellos, la cúrcuma ha ganado popularidad por sus posibles efectos positivos en la salud cardiovascular y su capacidad antiinflamatoria. Pero ¿qué dice la ciencia sobre sus beneficios?
La cúrcuma es una especia de color dorado que ha sido utilizada durante siglos en la medicina tradicional. Su compuesto activo, la curcumina, ha sido objeto de diversas investigaciones que analizan su impacto en el sistema cardiovascular. Se ha sugerido que puede contribuir a reducir la inflamación, mejorar la circulación sanguínea y regular los niveles de colesterol.
Uno de sus principales beneficios es su acción antioxidante y antiinflamatoria. La inflamación crónica es un factor de riesgo para el desarrollo de enfermedades cardíacas, y la curcumina podría ayudar a contrarrestar este proceso. Además, algunos estudios indican que puede mejorar la función endotelial, es decir, la capacidad de los vasos sanguíneos para dilatarse y contraerse adecuadamente, lo que es clave para una buena circulación.
Control del colesterol y la presión arterial
Otra de las propiedades que se le atribuyen a la curcumina es su capacidad para reducir los niveles de colesterol LDL, conocido como «colesterol malo», y los triglicéridos en sangre. Esto podría ayudar a prevenir la acumulación de placas en las arterias, reduciendo el riesgo de aterosclerosis y otros problemas cardiovasculares. Asimismo, hay evidencia de que podría contribuir a mantener la presión arterial en niveles saludables.
¿Cuál es la dosis recomendada?
Para aprovechar sus beneficios, los especialistas sugieren consumir entre 1 y 3 gramos de cúrcuma en polvo al día, lo que equivale a aproximadamente una cucharadita. Sin embargo, la curcumina tiene una baja biodisponibilidad, lo que significa que el organismo la absorbe con dificultad. Para mejorar su absorción, se recomienda combinarla con pimienta negra, que contiene piperina, un compuesto que potencia su efecto, o consumirla junto a grasas saludables como el aceite de oliva o de palta.
En el caso de los suplementos de curcumina, las dosis pueden ser más elevadas, pero deben ser indicadas por un profesional de la salud. El consumo excesivo podría provocar molestias digestivas o interferir con ciertos medicamentos, como anticoagulantes.
Un complemento, no un reemplazo
Si bien la cúrcuma puede ser una aliada para la salud cardiovascular, no debe sustituir un estilo de vida saludable ni los tratamientos médicos convencionales. Mantener una alimentación equilibrada, realizar actividad física regularmente y consultar con un profesional antes de incorporar suplementos es fundamental para cuidar el corazón y la salud en general.
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