José Luis, el deportista inoxidable de Río Colorado

José Luis Alarcón López con sus 76 años mantiene asistencia perfecta en las competencias de mountain bike, donde cada fin de semana va dejando su huella en los circuitos de toda la zona, demostrando a los más jóvenes que llevando una disciplina se puede mantener la vigencia en el deporte sin importar la edad.

Con la sencillez que lo caracteriza, “el petiso”, antes de salir al entrenamiento diario, se prepara unos mates. Muestra con orgullo la incalculables cantidad de medallas, plaquetas, diplomas, camisetas, trofeos y fotos que están guardadas, casi apilados, por todos los muebles y rincones de la casa. Todos ellos certifican su larga trayectoria compitiendo sobre una bicicleta, en el ámbito local, provincial y nacional.

Jose Luis es de nacionalidad Chilena. Cuando era muy pequeño, junto a sus padres y hermanos, llegaron a suelo rionegrio, donde inicialmente por un tiempo se instalaron en Cipolletti. Luego desembarcaron en el histórico establecimiento “El Viñedo”, sitio del emprendimiento productivo que encaminó en sus inicios a Río Colorado.

Recuerda que con apenas 12 años, luego de la jornada de trabajo, tomaba su pesada y descolorida bicicleta y recorría los 20 kilómetros de camino de tierra, para llegar hasta el centro de la localidad y jugar al fútbol en el club Villa Mitre.

Durante mucho tiempo, hizo este recorrido varias veces al día, porque además de su afición por el fútbol, también iba al cine o a algún evento social de aquellos tiempos. También se trazaba ese camino para ir a los bailes y al finalizar todo se volvía sin titubear a la zona de trabajo.

Una tarde de primavera conoció al recordado Edgardo Juan Peñagaricano, o más conocido como el “vasco Peña”, quien fue parte importante de la historia del ciclismo local. ‘‘Fue él quien me dijo, ‘che petiso, porque no corres en bicicleta, si vos con todos los kilómetros que haces por día estás mejor entrenado que otro de los chicos que corren’. Y fue así que me consiguió una bicicleta para correr en pista y me fue enseñando los secretos. Debutamos en el circuito de Bahía Blanca. Fue así que desde muy joven encontré mi amor por este deporte”, recuerda Alarcón.

Pasó por todas las categorías hasta que cumplió 60 años. Compitió en circuitos, pistas y rutas de varios puntos del país, donde subió a cientos de podios y también quedó masticando bronca por no poder terminar la competencia.

“Además de competir, también en este deporte pude conocer mucha gente y hacer miles de amigos, que me extrañan si un domingo no me ven en la línea de largada”, comentó sonriendo José.

Cuando cumplió los 60 años, el “petiso” se fijó otra meta:la de abandonar el asfalto. Cambió de bicicleta para empezar a desafiar caminos de tierra, o llenos de lodos, subir o bajar lomas, montañas para encontrar las huellas y señalizaciones que indican por donde va el camino. “Y la verdad es mucho más exigente, más duro y difícil. Pero es más entretenido, porque todo el tiempo tenes que sortear algún obstáculo. Es muy linda y seguiré compitiendo mientras me de el físico. Ojala que sea por muchos años más.”

El entrenamiento personal se cumple diariamente y sin escusa, Alarcón se sube a la bicicleta para recorrer un promedio de 50 kilómetros por día manteniendo un ritmo de 30 por hora.

La buena preparación física le permite a José estar listo para la carrera cada domingo. Llegó a estar presente en cinco competencias en el mes. “Eso lo puedo hacer porque, me cuidé toda la vida y sigo respetando la rutina delentrenamiento. Me permite tener un buen estado de salud.”

No hay demasiados secretos para este deportista que constituye un ejemplo para propios y extraños. ‘‘Sólo tomo unas vitaminas naturales que me recetan los para mantener el ritmo y la fuerza en las piernas’’. Y así, a los 76, José Luis no se cansa de pedalear.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios