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Un nuevo recurso demora el juicio por el femicidio de Otoño Uriarte

La interminable investigación por el femicidio de la joven de Fernández Oro atraviesa otro contratiempo. La causa se dilata por un pedido de un defensor. Semanas atrás el juez Guillermo Merlo aprobó el avance del proceso al control de acusación, instancia previa al debate.  

Con marchas y contramarchas, la causa por el femicidio de Otoño Uriarte, la joven de Fernández Oro, se encamina al juicio oral. Con la revisión de un juez de juicio, los imputados cuentan con un plazo para ofrecer la prueba.


Los testigos de identidad reservada seguirán en esa condición, al menos hasta el control de acusación. Solo un defensor público oscila entre avanzar o detener la acción de la fiscalía y la querella.
Hace unas semanas, el juez de juicio Guillermo Merlo dio el visto bueno para que la investigación avance a la instancia de control de acusación. Revisó así las últimas decisiones de la magistrada Agustina Bagniole.


Ante la jueza de garantías el defensor público Juan Pablo Piombo pidió un plazo extra de dos meses para concretar una pericia que tiene pendiente desde que la causa volvió de la Corte Suprema en 2021.
Pero después en la revisión cambió el criterio y sostuvo que no necesitaba el plazo: en los hechos la Oficina Judicial demoró tanto para fijar la audiencia que le otorgó el plazo, esquivando así los tiempos del código procesal.


Respecto de los testigos protegidos que tienen la fiscalía y la querella, Merlo no coincidió con la jueza Bagniole que había ordenado develar la identidad y difirió ese paso para el control de acusación.
Sin embargo, las partes acusadoras – algo molestas con la actitud del defensor – ahora tienen que contestar un pedido de “insubsistencia de la acción penal”.

En criollo, el mismo defensor Piombo que pedía plazo ahora pretende paralizar la investigación. Marchas y contramarchas en un recorrido casi esquizofrénico.

¿Juicio o no?

El resto de los defensores particulares también están apurados por el avance de la investigación, convencidos de que en juicio la prueba ofrecida por la fiscalía y la querella no va a pasar el filtro del tribunal. Será un juicio de jueces y juezas profesionales ya que por la antigüedad de la investigación no puede ir a jurados populares.


La incertidumbre reina por ahora la causa de la joven asesinada en Fernández Oro. Lo que tampoco se resolvió es la denuncia ante el tribunal de ética de la abogada de la querella Gabriela Prokopiew. La letrada asumió la representación del papá de Otoño Uriarte después de una fuerte polémica con el anterior abogado Marcelo Hertriken Velasco.


En una de las audiencias del año pasado, en la que se iba a tratar un pedido de sobreseimiento, hizo circular un audio de Whatsapp para convocar gente y tratar de torcer la decisión de la jueza.


Palabras más, palabras menos el contenido de la grabación decía que por más que la audiencia sea virtual la jueza escucha los bombos y reclamos desde su despacho y eso podría llegar a constituir una influencia.
El Tribunal de Ética del Colegio de Abogados que conduce Raúl Franco está trabajando en las actuaciones, según se confirmó.


Sería saludable para el sistema conocer las conclusiones antes de que el caso vaya a juicio. Ello teniendo en cuenta la delicada investigación que estuvo inmersa en innumerables polémicas.

¿Por qué no será juzgado por un jurado popular?

El nuevo Código Procesal Penal de Río Negro que se promulgó en 2017 establece que las causas graves serán juzgadas por un jurado popular integrado por ciudadanos provinciales.

Sin embargo, una acordada del Superior tribunal de Justicia estableció que se aplique en aquellas causas que se originen en hechos cometidos a partir del 1 de marzo de 2019. Por esa razón si la causa de Otoño llega a debate oral será juzgado por un tribunal colegiado.

“Que en virtud de la proximidad de la entrada en vigencia del Juicio por Jurados y con el objetivo de establecer criterios uniformes de aplicación en toda la Provincia resulta necesario determinar qué causas quedan comprendidas en dicho sistema de juzgamiento”, argumentaron los jueces y juezas del STJ.

En Río Negro ya se realizaron diecisiete juicios por jurados desde 2020, cuando se implementó por primera vez esa modalidad de juzgamiento vigente desde 2019. Esa fue la última etapa de la reforma procesal penal aplicada en 2017.


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