La CABB y las Gigantes acercaron posturas

Luego de que las Gigantes pusieran el grito en el cielo para dar a conocer su difícil situación, hoy dieron un paso en busca de la paz con la Confederación Argentina de Básquet (CABB) mediante una reunión virtual.

Los principales reclamos de las jugadoras de la selección estaban apuntados a la falta de planificación y a la incertidumbre laboral respecto a la suspensión de los torneos nacionales.

Sofía Aispurúa, integrante del equipo y una de las que hizo visible el enojo, calificó la charla como “un primer acercamiento a un camino largo por recorrer”.

El clima previo era caliente ya que en CABB molestó la forma de comunicar el malestar en un comunicado público y para las Gigantes era la única salida que veían posible. 

Incluso algunas jugadoras comentario que se enteraron de la reunión por las redes sociales, cuando todavía no las habían notificado.

El objetivo de los dirigentes fue intentar aclararle a las deportistas que no están solas y que, junto al cuerpo técnico, están a disposición.

Uno de los principales motivos de la protesta era la diferencia con los campeonatos masculinos. Mientras que la Liga Nacional de varones todavía no se suspendió y podría continuar, la de mujeres se dio por terminada.

El futuro de los torneos quedará para una próxima reunión al igual que el tema de las becas.

Desde CABB anunciaron que el seleccionado femenino, al igual que el masculino, concentrará en el Dow Center de Bahía Blanca antes de sus competiciones.

Además, informaron que crearán 46 escuelas en todo el país. La falta de inversión en las etapas de formación es una de las falencias históricas. 

La nueva gestión a cargo de la CABB, encabezada por Fabián Borro, se comprometió a mejorar la situación del básquet femenino y su primer gran desafío será calmar las aguas con las jugadoras del seleccionado.

El destrato y la desidia viene de larga data y quedó en evidencia el año pasado durante los Juegos Panamericanos de Lima. Por un error de logística al no tener el juego de camisetas adecuado para jugar, el equipo quedó eliminado.

En un año poco cambió y la pandemia de coronavirus no hizo más que agudizar el conflicto. Las Gigantes buscan, de una vez por todas, ser escuchadas.