La oposición pone en duda el aumento de tasas que impulsa Gennuso
El intendente de Bariloche propuso un incremento del 40% y ampliar el alcance a los monotributistas y autónomos. Por ahora no tiene los votos en el Concejo para que salga antes de fin de año.
El intendente Gustavo Gennuso quiene extender la tasa comercial a los monotributistas. Archivo
El incremento del 40% de la tasa municipal en Bariloche y ampliación de la base imponible a los monotributistas y autónomos que pretende el intendente Gustavo Gennuso, tiene serios cuestionamientos de la oposición, que con su rechazo podría frenar su aprobación en la última sesión del año.
El intendente presentó una reforma fiscal y tarifaria con una modificación de denominación a la tasa de inspección, seguridad e higiene (Tish) por Contribución a la Actividad Económica (CAE) para extender los tributos municipales no solo a las actividades económicas con habilitación sino también a toda persona que facture por servicios prestados en la ciudad.
Para aprobarlo, el oficialismo necesita del consenso con bloques opositores ya que requiere de 8 votos que hoy no los tiene.
El jefe de Gabinete, Marcos Barberis, fundamentó este cambio ante los concejales esta semana con el objetivo de que “toda actividad económica que se genere en Bariloche tribute al municipio” y agregó que la Tish tiene objeciones jurídicas por una supuesta doble contribución al realizar el cálculo con la facturación comercial, por lo que creyeron necesaria la modificación.
Las dos explicaciones de Barberis fueron refutadas con dureza por la presidenta del bloque Frente de Todos, Julieta Wallace, quien remarcó que “no se puede gravar toda actividad económica que se realice” y además cuestionó que tras 5 años de gobierno se justifique la medida con posibles litigios legales: “Si hay cuestionamientos judiciales me pregunto qué hicieron todos estos años”, enfatizó y advirtió que la creación de una contribución podría generar mayores litigios.
Roxana Ferreyra, también del Frente de Todos, ironizó que la Contribución a la Actividad Económica, le recordaba al “sistema tributario de la Edad Media donde se creaban tributos para que los vasallos paguen a la corona para ampliar sus gastos y la verdad que al pueblo le llegaba muy poco”.
Ariel Cárdenas (Juntos por el Cambio) y Gerardo Del Río (PUL) apuntaron al Ejecutivo por la “falta de claridad” en el proyecto y el “desconcierto” que tenían los concejales a pocos días del tratamiento de la ordenanza, previsto en principio para el próximo miércoles. Wallace también dijo en la comisión de Gobierno y Legales del miércoles que se necesita que “quien propone sea claro, conciso y concreto porque se va a hacer el cambio de una tasa consolidada como lo es la Tish a una contribución”.
La ausencia del secretario de Hacienda, Diego Quintana, en el debate en comisiones también molesta a los concejales opositores que reclaman su presencia para explicar los alcances de la reforma.
Barberis intentó responder las dudas junto al subsecretario de Hacienda, Fabián Olvar, que dijo que extender la tasa a los monotributistas responde a que “de alguna manera usufrutuan de ciertos servicios e infraestructura” municipal.
Otro contrapunto con el Frente de Todos es el porcentaje del incremento, de un 40%, en el contexto de crisis por la pandemia, un eje que también objeta Cárdenas. Según el jefe de Gabinete ese cálculo se llega por la “alta inflación dibujada por el Gobierno nacional, que es el 30%, y le calculamos que es un poco más porque los costos de servicios en Bariloche son un poco más caros”.
Wallace rechazó la apreciación y dijo que Nación en su presupuesto 2021 estimó una inflación del 29% y la provincia entre un 32 y 33%, “hablar de un 40% de pauta inflacionaria es hablar de tarifazo, lo que están haciendo es imponer un tarifazo desde el aumento de la tasa, el aumento del 3 al 6% del espacio aéreo (de la CEB) que lo tienen que pagar los contribuyentes y la ampliación de la base contribuyentes con monotributistas y autónomos”. Según sus estimaciones, el impacto para muchos contribuyentes sería superior al 60% tomando las tres modificaciones.
Un primer “gesto” del oficialismo ante el rechazo opositor fue presentar un proyecto reformulado en el que desaparecen dos de los gravámenes que pretendía crear: una tasa para gravar a los generadores de residuos de hidrocarburos y otra que se iba a aplicar a todos los contribuyentes a razón de 95 pesos por mes, con el fin de cubrir las bonificaciones por jubilación de los empleados municipales.
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