La Pastoral exige una urgente intervención del Estado en el Confluencia

Barrio marcado por la violencia

La Pastoral Social de Neuquén exige la urgente intervención del Estado provincial en el Confluencia, un barrio capitalino marcado por la violencia entre bandas de jóvenes y que en menos de tres meses se registraron tres asesinatos.

El equipo del Obispado manifiesta en un escrito que no pueden ser “indiferentes ante la dolorosa realidad” que padecen los vecinos. Asegura que “no son pocos los que temen un estallido social en esa zona de nuestra capital provincial”.

Le preocupa la ausencia del Estado y dice que la Justicia “deja la puerta abierta a buscar justicia por mano propia” y así “hará crecer el espiral de violencia”.

Reclama “una inclusión social auténtica, dejando de limitarse a declaraciones públicas y a sumar más policías y patrulleros, que ya está demostrado no colaboran a ninguna solución”.

Finalmente, dice que la misma realidad sucede en los barrios del oeste y sur de la capital.

A continuación publicamos la carta completa:

“SOLIDARIDAD y EXIGENCIA

Como Equipo de Pastoral Social del Obispado de Neuquén, no podemos permanecer indiferentes ante la dolorosa realidad que están viviendo los vecinos del Barrio Confluencia de Neuquén Capital.

La violencia social, fruto de ausencias inexplicables y negación de derechos imprescindibles, ha enrarecido de tal manera la convivencia del Barrio que no son pocos los que temen un estallido social en esa zona de nuestra capital provincial.

Queremos y necesitamos solidarizarnos con los vecinos del Barrio Confluencia que soportan esta delicada situación, especialmente con quienes han sufrido pérdida de vidas humanas, o daños personales o materiales.

Nos preocupa seriamente la ausencia del Estado que al no garantizar los derechos fundamentales de las personas, fomenta el caldo de cultivo de una exclusión social que deriva en prácticas que benefician inescrupulosamente a algunos y perjudican a todos.

Se nos hace inexplicable la ausencia de una Justicia que deja la puerta abierta -casi como una invitación implícita- a buscar “justicia por mano propia”, como una manera de promover actitudes de venganza que harán crecer el espiral de violencia que ya se sufre.

Exigimos como ciudadanos la urgente intervención del Estado provincial -en sus tres poderes- para que seriamente se ocupe de la realidad que padecen estos vecinos y realice acciones que conlleven a una inclusión social auténtica, dejando de limitarse a declaraciones públicas y a sumar más policías y patrulleros, que ya está demostrado no colaboran a ninguna solución.

Lamentablemente no podemos dejar de señalar que no solo el Barrio Confluencia es quien padece esta situación, lo mismo sucede en los barrios del oeste y sur capitalinos; lo cual no es casualidad, pues son estos los sectores más postergados y abandonados.

Entendemos que solamente escuchando a todos los vecinos, pero sobre todo escuchando con atención comprometida la dolorosa realidad que los mismos viven, se encontrarán los caminos que conduzcan a una superación verdadera de la realidad.

Que el Estado provincial vaya al Barrio Confluencia, no a buscar los votos que necesita para mañana, sino a llevar las soluciones que esos vecinos necesitan hoy mismo.

Neuquén, 17 de marzo de 2015.

Andrés Rebolledo, Carla Madaschi, Rubén Capitanio y Nelson Castro. Por Equipo de Pastoral Social Obispado de Neuquén”

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