“Los vicios ocultos en la selección de los defensores del pueblo”
Deseo expresar mi descreimiento cívico hacia la selección de los postulantes de la Defensoría del Pueblo.
Elaboré mi propuesta con la noble intención de aportar mejoras e innovaciones al sistema actual y además pretendía que la misma hubiese sido valorada con la ponderación, objetividad y dimensión que se requiere para un proceso como el implementado por la Legislatura provincial. Mi propuesta era ambiciosa y posible, como docente sabía cómo implementarla, y también involucraba a los alumnos de la educación primaria y media de los establecimientos educativos de Río Negro con activa participación: la creación de un área específica de iniciativas parlamentarias dentro de la Defensoría, ya que desde el 2009 a la fecha se presentaron sólo seis IP de acuerdo a lo informado por la página oficial del organismo en internet; la habilitación de mesas de recepción de denuncias en lugares públicos; la radio abierta de la Defensoría, el acercamiento de la misma a la gente por otros medios; etc. Y así propicié once actividades más.
No pude analizar, ni comparar, las demás presentaciones porque no fueron públicas, ni las harán públicas. Una de mis iniciativas (no tan relevante) era propiciar que la elección del defensor del pueblo se establezca en forma directa, elegido con el voto directo de la gente y no por medio de sus representantes, como está legislada en la actualidad. Lo señalado en la entrevista no agradó.
Enorme ha sido mi disgusto al tomar conocimiento de los diez postulantes que han sido seleccionados, de los cuales siete ameritan fehacientemente haber permanecido en el listado de postulantes y merecen mi mayor respeto, pero hay tres que por su trayectoria profesional y trabajo realizado no ameritan haber sido nominados.
Pero lo peor del proceso es si, por conveniencia, acuerdo o connivencia, uno o dos son ungidos para ocupar el cargo.
Si se cumple lo informado oportunamente por un diario regional con respecto a la nominación realizada, donde la misma depende de un negociado entre los poderes del Estado, realmente todo el proceso implementado habrá sido repudiable.
La política y el diablo otra vez metieron la cola en el proceso.
Ante ello, más profundizo la defensa al considerar que el defensor del pueblo debe ser elegido directamente por el voto de la gente y no por acuerdo entre los legisladores.
Por último, hubiese sido transparente que estuvieran todos los postulantes presentes y delante de todos hubiésemos podido exponer nuestras ideas como se estila en el nivel superior o universidad, donde todos podemos apreciar cuánto sabe el otro de la temática Defensoría del Pueblo. En esa instancia no cabría duda que se podría haber elegido a los mejores.
Miguel Ángel Knecht
DNI 14.727.625
“La política y el diablo otra vez metieron la cola en el proceso. Ante ello, más profundizo la defensa al considerar que debe ser elegido directamente”.
Miguel Ángel Knecht
DNI 14.727.625
Datos
- “La política y el diablo otra vez metieron la cola en el proceso. Ante ello, más profundizo la defensa al considerar que debe ser elegido directamente”.
Comentarios