Mägo de Oz, la magia heavy llega a Roca

El grupo español –integrado hoy por Javier “Zeta” Domínguez en voz y coros, Carlitos en guitarra solista y banjo, Frank en guitarras rítmica y acústica y coros, Mohamed en violín y viola, el bajista Fernando Mainer, Josema en flautas travesera y dulce, pito castellano, whistle y bodhran, Javi Diez en teclados, sintetizadores, acordeón y guitarra, la segunda voz y los coros de Patricia Tapia y Txus en batería, voz, composición y coros)– llega a la Patagonia, en el marco de su gira americana 2013 “Brujería, brujería (tan dentro del alma mía)” para presentarse este domingo, a las 17, en el Club del Progreso.

Txus di Fellatio –Jesús María Hernández Gil (Bilbao, 21/01/70)– fundador de Mägo de Oz dialogó con “Río Negro”, desde Colombia.

“Bueno, cuando cambias algo tan importante como el cantante, la primera voz, siempre te queda la pequeña duda de si la gente lo aceptará, lo entenderá, y la verdad es que nos hemos llevado un muy grata sorpresa, aunque nosotros estábamos convencidos que el espíritu de Mägo de Oz sigue intacto porque –¡vamos!– siempre lo digo… Aunque el Pato Donald cantara, siempre iba a sonar a Mägo de Oz, porque tenemos ya una forma de entender la música muy clara y que todo el mundo puede identificar. Pero igual queda ese pequeño interrogante… Tal que el otro día hemos agotado las entradas en Bogotá, luego en Bucaramanga y agregamos otro concierto porque había quedado mucha gente afuera, sin poder vernos. Está siendo una gira sorpresiva pues no esperábamos tan buena acogida como la que estamos teniendo.”

–Quizás se deba a la identidad del último disco (“Hechizos, pócimas y brujería”) y a que han renovado tres integrantes…

–Claro, claro… Creo que ocurre como con un equipo de fútbol cuando hay fichajes nuevos, fichajes buenos… Revitalizan. Aquí han entrado tres personas que musicalmente son muy valiosos y podeis verlos en You Tube o en cualquier canal de música haciendo un solo de bajo espectacular, otro de teclado y piano, del mismo modo. La gente está viendo que ellos superan mucho lo que había antes, a nivel técnico. Y lo que dices en cuando al disco, sabíamos que era muy importante en la carrera de Mägo de Oz y no podía resultar un trabajo más. En los últimos con José Andrëa (se anunció oficialmente su alejamiento) nos dejamos llevar un poco más por la sinergia y por rellenar el expediente. No teníamos la colaboración musical ni personal del cantante porque él estaba con sus whiskys y sus otras historias… Ahora tenemos alguien muy profesional, que cuida mucho la voz y está encantado de formar parte de la banda.

–¿Cómo fue la selección? Estaba postulado el argentino Christian Bertoncelli, por ejemplo.

–Sí. Christian ha sido siempre uno de mis niños bonitos (sonríe). Su voz es es-pec-ta-cu-lar, y lo tenía en mente para sustituir a José Andrea, pero era muy complicado que él viviera en Argentina y estuviera por ser padre nuevamente. Esas cosas que complican para hacer viajar a una familia hasta otro país, mas la incertidumbre de si podía tener o no continuidad en la gira… Esto nos paró un poco a la hora de decidirnos por él. Pero es una de las mejores voces que he escuchado nunca y si residiera en Madrid en vez de Buenos Aires, estaríamos hablando de un cantante argentino en Mägo de Oz. El resto, hicimos una convocatoria a nivel mundial por nuestra página web y podía ser cualquier persona que quisiera cantar. Nos encontramos con gente profesional, gente que se divertía, que nos quería conocer nada más… Había un poco de todo. Pues, de ahí seleccionamos a diez cantantes, de los cuáles, a tres les llevamos a un estudio de grabación para hacerles una prueba en directo y uno de ellos fue Javier “Zeta”, y cuando lo escuchamos, dijimos que era la nueva voz porque es muy peculiar, muy linda, con unos tonos muy bellos que no se aleja demasiado de la de José Andrëa pero tiene unos matices de hard rock que estábamos buscando para el último compacto, en el que hay mucho de ese género y de rock americano. Nos pareció un cantante muy versátil, adecuado para lo que queríamos hacer.

–¿Cómo serán los conciertos en Argentina?

–En principio, serán largos. Van a durar dos, dos horas y media, cada uno y vamos a tocar nueve de las trece canciones de “Hechizos, pócimas y brujería”, y luego unos trece, catorce clásicos de la historia de Mägo de Oz, algunos que hace ocho, nueve años no tocamos. Va a haber tres solos, de flauta, de teclados y de bajo.

Eduardo Rouillet