Mónica, la maestra que murió en Aguada San Roque, tiene un aula con su nombre
Es en el ISFD 9 donde recientemente se había recibido de docente. Todavía no le habían entregado el título.
Mónica Jara, la maestra que murió en Aguada San Roque, tiene un aula con su nombre. (gentileza ATEN)
Mónica Jara recién se había recibido de docente, aún no tenía su título en mano, pero ya estaba autorizada a trabajar. Así fue que apenas se decretó la vuelta a la presencialidad, no lo dudó y se embarcó en lo que era su primer trabajo. Tomó una suplencia en la escuela albergue de Aguada San Roque. Ese día, a la tarde, un calefactor explotó. Dos operarios murieron en el instante y Mónica quedó gravemente herida. Murió 13 días después. Ayer se le dio su nombre al último aula donde estudió.
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Ayer por la tarde en el ISFD 9 hubo un sentido y profundo homenaje a Mónica, la maestra de 34 años que recientemente había egresado de la institución y se encontraba cubriendo su primera suplencia en la docencia cuando perdió la vida por la trágica explosión en la Escuela 144.
Estuvieron presentes sus compañeras de estudio, docentes de la carrera, su familia y representantes de los gremios docentes ATEN y Unter.
Desde ATEN señalaron que se vivieron momentos de mucha emoción y afecto entre los presentes a la hora de de descubrir la placa que le asigna el nombre «Maestra Mónica Jara» a una de las aulas del IFD, la última en la que finalizó su carrera como docente.
A su vez, en el mismo acto se le hizo entrega a sus familiares del título de «Profesora de Enseñanza Primaria» que debiera haber recibido Mónica.
«En el acto, hubo palabras alusivas que resaltaron quién es Mónica, sus valores y motivaciones, su calidad humana e inteligencia al momento de estudiar la carrera», contaron desde el gremio docente.
Desde las organizaciones sindicales se planteó la necesidad de resignificar el dolor y la indignación ante lo sucedido para enfocar esas energías en obtener la justicia por Mónica y su familia. Asimismo, se enfatizó la necesidad de una militancia obligada y comprometida para mantener viva la memoria por Mónica y asegurar «que cada maestro tenga bien presente quién es y además garantizar que nunca más vuelva a ocurrir algo similar».
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