Para tener en cuenta

PATAGONES (AV)- En el hospital de Patagones la situación es diferente a la de Viedma. Si bien han sido atendidos niños con afecciones respiratorias -hasta el momento- son los casos esperados para esta época del año. No han superado la estadística 2009 para este mismo mes. La directora del nosocomio, Adriana Paredes, confirmó que dos nenes fueron derivadas desde el hospital Zatti de Viedma. Una de ellas ya fue dada de alta y la otra permanece con oxígeno. La bronquiolitis es una enfermedad común respiratoria, típica del invierno, provocada por una infección que afecta las vías respiratorias. Si bien, a menudo, se trata de una enfermedad leve, algunos bebés están en riesgo de sufrir una afección más grave que requiere hospitalización. Las condiciones que aumentan el riesgo de una infección severa incluyen el nacimiento prematuro, una enfermedad pulmonar o cardíaca crónica previa y un sistema inmunológico debilitado por enfermedades o medicamentos. Los primeros síntomas de la bronquiolitis suelen ser iguales a los de un resfriado: congestión, moqueo, tos y fiebre. Son seguidos de un agravamiento de la tos y la aparición de un sonido sibilante, respiración poco profunda, rápida frecuencia cardíaca acelerada, hundimiento del cuello y el tórax, dificultad para dormir.


PATAGONES (AV)- En el hospital de Patagones la situación es diferente a la de Viedma. Si bien han sido atendidos niños con afecciones respiratorias -hasta el momento- son los casos esperados para esta época del año. No han superado la estadística 2009 para este mismo mes. La directora del nosocomio, Adriana Paredes, confirmó que dos nenes fueron derivadas desde el hospital Zatti de Viedma. Una de ellas ya fue dada de alta y la otra permanece con oxígeno. La bronquiolitis es una enfermedad común respiratoria, típica del invierno, provocada por una infección que afecta las vías respiratorias. Si bien, a menudo, se trata de una enfermedad leve, algunos bebés están en riesgo de sufrir una afección más grave que requiere hospitalización. Las condiciones que aumentan el riesgo de una infección severa incluyen el nacimiento prematuro, una enfermedad pulmonar o cardíaca crónica previa y un sistema inmunológico debilitado por enfermedades o medicamentos. Los primeros síntomas de la bronquiolitis suelen ser iguales a los de un resfriado: congestión, moqueo, tos y fiebre. Son seguidos de un agravamiento de la tos y la aparición de un sonido sibilante, respiración poco profunda, rápida frecuencia cardíaca acelerada, hundimiento del cuello y el tórax, dificultad para dormir.

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