Tres barrios bajo fuego: investigan si cuatro tiroteos en Centenario están conectados entre sí
Una seguidilla de tiroteos en Centenario dejó casquillos, plomos y miedo. Se investiga un ajuste de cuentas. Los ataques ocurrieron en tres barrios distintos.
Investigan si fue un ajuste de cuentas. No hubo heridos, pero sí temor en los barrios.
La madrugada en Centenario fue todo menos silenciosa. Las balas retumbaron en al menos tres barrios distintos. No hubo víctimas fatales ni heridos, pero el miedo dejó su huella en ladrillos que quedaron perforados por disparos. Algunos vecinos quedaron mudos del miedo y, otros, no colaboraron por enojo. Mientras tanto, la Policía y Fiscalía intentan reconstruir los hechos.
Cuatro tiroteos, tres calibres diferentes y una misma sospecha: ajuste de cuentas. La violencia se desató entre las 0:40 y las 5:30 de este martes, dejando siete vainas servidas por escena y pocas respuestas. La Justicia ya trabaja junto a la policía para identificar a los responsables.
Primer disparo: Tiros en Traun Hue
El primer ataque ocurrió pasadas las 0:40 de la madrugada, en la intersección de Honduras y José Martín, en el barrio Traun Hue. Una casa fue baleada, y aunque nadie resultó herido, los disparos impactaron de lleno en el frente.
La víctima, entrevistada por la policía, reconoció tener problemas de larga data con tres hombres, lo que fortaleció la hipótesis de un conflicto personal. Se secuestraron siete vainas calibre 38.
Segundo ataque: Vista Hermosa, en el blanco
Apenas una hora después, la violencia se trasladó al barrio Vista Hermosa. Sobre las calles Cuba y Artigas, nuevamente una vivienda fue blanco de disparos. En este caso, se hallaron otras siete vainas, esta vez calibre 9 milímetros.
Los dueños del lugar, según informaron fuentes policiales, se mostraron molestos no solo por el ataque, sino también por la presencia policial. Esa actitud llamó la atención de los investigadores.
El tercer tiroteo fue en El Alto
El reloj marcaba las 3:15 cuando los disparos volvieron a escucharse, esta vez en calle Lago Correntoso, en el barrio Del Alto. Allí, dos hombres a bordo de una moto 110 cc fueron señalados como los autores del ataque.
La escena dejó, otra vez, siete vainas. En esta ocasión, calibre 22. También fue hallado un proyectil deformado, lo que indica que los disparos habrían sido realizados a corta distancia y con intencionalidad directa.
Cuarta ráfaga: otra vez Traun Hue
El último episodio tuvo lugar a las 5:30, nuevamente en el barrio Traun Hue, pero ahora en la intersección de Cuba y Los Aztecas. El patrón se repitió: siete vainas 9mm, tres plomos deformados y el sonido seco de las armas irrumpiendo el sueño de los vecinos.
Nuevamente, nadie resultó herido. Pero la repetición del modus operandi, el uso de motos, la elección de las viviendas, y la ausencia total de denuncias fortalecen la teoría de un ajuste de cuentas.
Investigación en marcha
Luis Aguirre, comisario de la Unidad 52, confirmó que los hechos se están investigando como parte de una misma línea, aunque fueron ejecutados con armas distintas. «No descartamos una vinculación directa», afirmó.
El Ministerio Público Fiscal trabaja con los registros fílmicos y la evidencia balística. Solo se presentó una denuncia formal, lo que complica la identificación de los autores. Mientras tanto, se sumó la colaboración de la policía metropolitana en tareas de prevención.
Aunque se levantaron pruebas en los cuatro puntos, lo que llamó la atención de las autoridades es el silencio absoluto de las víctimas. Ni los disparos en sus frentes, ni el peligro de represalias, parecen empujarlos a colaborar.
Los investigadores creen que este tipo de episodios, sin heridos pero con un mensaje claro, podrían ser parte de escaladas territoriales entre grupos enfrentados.
La madrugada en Centenario fue todo menos silenciosa. Las balas retumbaron en al menos tres barrios distintos. No hubo víctimas fatales ni heridos, pero el miedo dejó su huella en ladrillos que quedaron perforados por disparos. Algunos vecinos quedaron mudos del miedo y, otros, no colaboraron por enojo. Mientras tanto, la Policía y Fiscalía intentan reconstruir los hechos.
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