Impiden remoción de un médano en Las Grutas

Martín Brunella

LAS GRUTAS (ASA)- Un grupo de vecinos del barrio Terraza al Mar impidieron el jueves por la tarde que una máquina comandada por personal municipal derribara por completo una franja del cordón de médanos ubicado a metros de la calle Costanera. Supuestamente, las obras municipales buscan abrir un camino, que despejaría el acceso a un predio privado, que es propiedad de Carlos Rivas (uno de los titulares de la cámara de comercio local) y de Roberto Del Giúdice, un conocido comerciante de Bariloche que encabeza el círculo de empresarios del Cerro Catedral. Ambos son inversionistas en un proyecto que pretende lotear para la venta esa fracción que queda frente al lugar en que comenzó la remoción. La tierra se la compraron hace años al Círculo de Legisladores. El camino en cuestión se extendería más allá de la ubicación del camping de esa entidad, despejando, de concretarse, una vastísima fracción de arena que les garantizaría a ambos una visión directa de la playa. Los empresarios citados argumentan que 9 meses atrás, al solicitar la apertura de la arteria, la comuna les pidió que para intervenir el médano debían tener la aprobación de Medio Ambiente provincial. “Conseguimos una nota firmada por su titular Laura Juárez, que habilita la apertura del camino. No sé porqué los vecinos hacen tanto lío”, expresó ayer Del Giúdice. Lo cierto es que una ordenanza del año 2006, que sigue vigente, regula el manejo urbanístico y ambiental de ese sector, impidiendo de manera expresa cualquier intervención sobre ese cordón dunar. La norma habilita sólo “áreas de tránsito peatonal restringido” y destina exclusivamente a la inversión hotelera las fracciones fiscales más grandes linderas a esas dunas, impidiendo subdivisiones. El jueves la intervención popular evitó que el avance sobre los médanos siguiera. Sin embargo, antes de que la gente solicitara paralizar las tareas los operarios llegaron a completar un camión con la arena removida. Según los testigos, el móvil pertenecía a la firma Alpat. Al enterarse de la paralización de las labores se hizo presente en el sitio el titular de Obras Públicas, Fabricio Curzel. Los vecinos relataron que el funcionario los trató con brusquedad y a viva voz manifestó que no había nada malo en el movimiento de suelo, que retomarían al día siguiente (por ayer). Pese a los múltiples intentos de este medio, fue imposible establecer contacto con él. Los vecinos elaboraron un escrito que presentarían hoy ante las autoridades municipales y la convocatoria a la Fundación Ambientalista Inalafquen, que se ocupó de trasladar la inquietud acerca de lo ocurrido a la secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Provincia.