Procesan a exlegislador del FpV por amenazas

BARILOCHE (AB).- Marcos Catalán llegó contento la madrugada del 24 de agosto de 2013 al pub Dos Ruedas de El Bolsón dispuesto a seguir con la celebración, junto a un grupo de amigos y conocidos. Catalán era entonces legislador del bloque del FpV. Sin embargo, la fiesta terminó de manera abrupta. Catalán estaba bajo los efectos del alcohol y amenazó a un cabo de la Policía de Río Negro, que no le permitió el ingreso al local nocturno. La situación originó un incidente que derivó en una causa penal y el juez de instrucción Marcos Burgos lo procesó por el delito de amenazas, informaron ayer fuentes judiciales. El problema se originó porque el exlegislador se negó al “cacheo” habitual que hace el personal de seguridad en locales nocturnos. Catalán se molestó porque el agente policial no lo reconoció como legislador de la zona Andina. “¡Yo, si quiero, te hago echar!”, le advirtió a los gritos Catalán al agente luego de que no lo dejara entrar, revelaron las fuentes. Burgos procesó el 23 de diciembre pasado al imputado por el delito de amenazas. De acuerdo con la acusación fiscal, el hecho ocurrió la madrugada del 24 de agosto de 2013, cuando Catalán intentó ingresar a la confitería-pub Dos Ruedas, ubicada en la avenida San Martín 2538 de El Bolsón. El fiscal Martín Govetto promovió la acción penal y pidió la indagatoria del imputado. Sin embargo, el juez de instrucción Ricardo Calcagno sobreseyó el 28 de julio pasado a Catalán. Govetto apeló el fallo de Calcagno. Advirtió que si bien Catalán pudo haber estado bajo los efectos del alcohol, la conducta y amenazas que lanzó contra el agente policial fue en calidad de legislador. El fiscal señaló en la apelación que en la comisaría 12 de El Bolsón, el exlegislador simulaba que hablaba por celular con el jefe de la Policía de Río Negro, Fabián Gatti, y hasta con el gobernador Alberto Weretilneck, para amedrentar a los agentes. La defensa de Catalán advirtió en su rechazó a la apelación de Govetto que no correspondía atribuirle un delito cuando del acta policial surge el estado de ebriedad del imputado, consignaron las fuentes. Por eso, pidió confirmar el sobreseimiento. Pero la Cámara Criminal Primera de esta ciudad revocó el 5 de octubre pasado el sobreseimiento y apartó al juez de la causa, que cayó en manos de Burgos, que a su vez lo procesó trece días después de que Catalán finalizara su mandato como legislador provincial. De todos modos, el fallo no está firme porque puede ser apelado.

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