Repudian dichos de una concejal de Chimpay que habló de «guerra civil» a partir del 24 de marzo
Habló en nombre del Angel Funes, hermano del intendente Hugo Funes, y fue cuestionada por vecinos e instituciones que plantearon la "frágil formación en Derechos Humanos".
Las pancartas pegadas con rechazos a la frase del edil oficialista.
Un grupo importante de vecinos como de instituciones de la localidad de Chimpay se movilizaron para repudiar los dichos de los funcionarios municipales en el acto oficial en conmemoración de los 45 años del 24 de marzo, Día por la Memoria, la Verdad y la Justicia.
En dicho acto, la concejal del oficialismo Mariana Sambueza leyo el texto por pedido del hermano de intendente Hugo Funes, Ángel, Secretario de Cultura del municipio, e hizo una seria de afirmaciones entre las que señaló que “a partir de esa fecha se desata una verdadera guerra civil en Argentina. Guerra armada y guerra ideológica. Quedaron en el camino los muertos que lucharon por sus ideales”.
Rápidamente los vecinos, organizaciones y agrupaciones se movilizaron para repudiar el mensaje oficial, incluso a lo largo del día fueron empapelando con panfletos y carteles frente al edificio municipal para hacer visible el malestar.
Además emitieron un documento avalado por la firma de medio centenar de personas de la localidad que señala: “No fue una guerra civil, fue terrorismo de Estado. Durante el acto, en el discurso oficial realizaron una serie de afirmaciones que dan cuenta de la frágil formación en Derechos Humanos que tienen los representantes del Estado municipal, y la evidente ignorancia en relación con los delitos de lesa humanidad cometidos por el estado argentino entre 1976 y 1983 en el marco de un genocidio político, cultural y social”.
“Entre las afirmaciones, se habló de una “guerra civil”, y se enarboló el discurso híbrido que sostiene que “hay que desterrar el odio, rencor y fanatismo”, como si se tratara de una proclama de autoayuda. Parece vergonzoso en su pronunciación actualicé el viejo discurso nefasto de «la teoría de los dos demonios». Consideramos tanto indiferente como aberrante y violento para con las víctimas del genocidio, las madres, abuelas e hijos violados, torturados, fusilados, desaparecidos”
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