El nuevo lago de la Patagonia que surgió como consecuencia del cambio climático
El glaciar Ventisquero Negro retrocede. El espejo de agua que se formó ya tiene 70 metros de profundidad. ¿Dónde queda?
El nuevo lago ya tiene 70 metros de profundidad. Foto: gentileza
Cuando un grupo de investigadores se abocó a estudiar el retroceso del glaciar Ventisquero Negro, uno de los doce glaciares del cerro Tronador, advirtió la conformación de un lago que, hoy, ya tiene 70 metros de profundidad.
«Desde que lo empezamos a estudiar en 2012 a la actualidad, el Ventisquero Negro se retira a pasos agigantados. El lago lentamente irá perdiendo contacto con el hielo. Se está conformando un lago glaciar tal como son los que nos rodean», señaló Beatriz Modenutti, investigadora del Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Medioambiente (Inibioma) que depende del Conicet y la Universidad Nacional del Comahue.
Ese lago, mencionó, todavía está en conexión con el glaciar aunque probablemente en un futuro, de continuar la tendencia de retracción glaciaria, se desconectará. «Todos los lagos de la región andina son de origen glaciario. Tuvieron alguna vez un glaciar que los originó y luego, se desconectaron de esos glaciares», dijo Modenutti a Diario RÍO NEGRO.
Consideró la situación como el «síntoma más notable del cambio climático en las regiones montañosas: el retroceso glaciar y la confomación de nuevos lagos».
El Ventisquero Negro es un glaciar secundario que se forma por la llegada del material de otros glaciares que se encuentran a más altura. Su nombre obedece a que está cubierto de sedimentos. No se logra ver el hielo blanco, excepto cuando hay algún desprendimiento.
El equipo que lidera Modenutti concurre hasta el lugar una o dos veces al mes, desde la primavera hasta abril -aunque también acuden cuando las condiciones del invierno lo permiten-. Allí se extraen muestras de agua para hacer análisis y experimentos en laboratorio.
Modenutti explicó que los lagos son estructuras muy dinámicas en el tiempo. «En el caso que estudiamos, inicialmente el color del agua era muy oscuro porque recibía mucha arcilla glaciar. Actualmente tiende a ser más transparente porque a medida que pasa el tiempo, la arcilla glaciar decanta y esta situación trae consecuencias también en la cuenca del río Manso y el lago Mascardi», afirmó.
Comentó que el lago Mascardi recibe recibe aguas con arcillas glaciares a través del Río Manso Superior que nace de glaciares del Tronador. «Hoy esto se modificó porque parte de esas arcillas decantan en el nuevo lago. Entonces toda la cuenca del río Manso se está viendo afectada ya que el agua es mucho más clara “, indicó.
Esta situación cambia los ambientes por completo. Se modifican los organismos (como las algas) y por ende, todo el ecosistema.
«Estamos perdiendo una enorme biodiversidad ya que se pierde un ecosistema completo, el del hielo de los glaciares. Hay muchos organismos, como hongos y bacterias que se están perdiendo. Muchos de esos microorganismos subsisten en el nuevo lago pero se terminan perdiendo porque se pierde la estructura donde vivían, es decir el hielo», puntualizó Modenutti.
Resaltó también que, en la zona, ocurre un cambio en el paisaje que repercute sobre los ambientes acuáticos. Sucede que cuando se retira el hielo, el suelo se coloniza rápidamente por vegetación.
«Todos estos sucesos están acelerados y obedecen a un cambio climático global con un incremento de la temperatura y cambios en precipitaciones «, planteó.
Según el glaciólogo Lucas Ruiz, entre 2000 y 2012 el cerro Tronador perdió 0.22 kilómetros cúbicos de hielo.
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