Solo se operan los casos de urgencia en Bariloche y otros hospitales rionegrinos: «Se ponen parches para apagar el fuego»

Desde hace un mes, no se realizan cirugías programadas. Desde el gremio Asspur aseguran que faltan insumos y profesionales.

El hospital Ramón Carrillo de Bariloche no realiza cirugías programadas desde hace un mes. Solo avanza con intervenciones de urgencia que no pueden esperar.

«No hay insumos y se van yendo profesionales por los sueldos magros. No sucede solo acá: en otros hospitales de la provincia se van cerrando servicios, como es el caso del Servicio de Neonatología de Cipolletti. Los cirujanos de Bariloche están viajando a Ingeniero Jacobacci porque allí no hay cantidad suficiente para paliar la situación. Estamos con la sábana corta«, describió Alicia Santibañez, enfermera del hospital de Bariloche y afiliada al gremio Asspur.

¿Por qué razón no se concretan las cirugías programadas? «Por falta de hay insumos desde hace un mes«, respondió. «No tenemos anestésicos, ni para suturas, ni descartables. No tenemos reactivos para laboratorio desde hace, por lo menos, seis meses. Un paciente, por ejemplo, que necesita operarse y requiere un laboratorio extenso, la mitad de esos análisis no se pueden hacer. Tampoco se puede operar a ciegas», advirtió.

El hospital Ramón Carrillo en Bariloche. Foto: Chino Leiva

Confió que solo cuentan con «lo básico» y por eso, se trabaja sobre la emergencia. Se van postergando las operaciones ginecológicas, traumatológicas y neurológicas, entre otras especialidades.

«¿Qué se le dice al paciente? Los trabajadores no podemos decirle: ‘no tenemos nada’. Eso le corresponde al Estado. Lo cierto es que no podemos correr el riesgo de mandar a alguien al quirófano si no tenemos elementos«, advirtió.

Al ser consultado, el director del hospital Ramón Carrillo en Bariloche, Víctor Parodi, manifestó que están realizando cirugías aunque «tenemos problemas vinculados a la caída del convenio con la empresa a cargo de las esterilizaciones en Neuquén» desde hace un mes. «La provincia no avanzó en la firma del convenio y estamos viendo de hacernos cargo desde el hospital de Bariloche, pero necesitamos tener garantías porque te comprometés al pago en un cierto período«, dijo.

También hay preocupación por la falta de profesionales. Foto: Chino Leiva

Parodi afirmó que «hay insumos» aunque reconoció que, al haber deudas con los proveedores, «no envían el 100% de los pedidos»: «Con la crisis, estamos atados a las nuevas reglas de los proveedores: hoy, quieren pago contra entrega. Los quirófanos están funcionando para las emergencias, pero estamos sujetos a que los proveedores nos garanticen los envíos. También nos perjudicó la situación del fentanilo contaminado porque nos representaba el 70% de los medicamentos que teníamos en los hospitales».

La crisis se refleja en otros hospitales

La situación de emergencia se replica en otros hospitales de la provincia. «Semana a semana la situación es cambiante. Hoy Bariloche tiene suspensión de cirugías programadas por falta de insumos. Mañana le caen insumos y arrancan. Pero en 15 días vuelven a frenar. Esto pasa en todos lados: al que no le falta insumos, le falta aparatos o profesionales. Hay planes de contingencia todas las semanas«, confió Cesira Mullaly Bezic, secretaria general de Asspur San Antonio.

Se refirió al cierre del área de Neonatología en el Hospital de Cipolletti la semana pasada: «Se derivaron a los pacientes y este fin de semana, volvieron a abrir aunque recibían solo niños de más de 32 semanas. Los de menos semanas eran recibidos por Roca. Estamos trabajando así en todos lados».

En varios hospitales se suspendieron las cirugías programadas. Foto: Chino Leiva

Mullaly Bezic admitió que «estamos supeditados a lo que cada hospital pueda ir comprando con rifas de la comunidad y solventar algunas cuestiones. Algunos hospitales suspenden las cirugías otros no tienen Pediatría, como el caso de Roca. En San Antonio tenemos un solo ginecólogo, de modo que durante 15 días al mes no tenemos servicio. A una semana desde el incendio que dejó fuera de servicio el hospital Zatti de Viedma, el quirófano sigue cerrado».

En relación a la suspensión de las cirugías programadas, la delegada de Asspur puso como ejemplo la operación de una vesícula: «El paciente empieza con síntomas, le indican que debe operarse, pero no puede en este momento por la situación. Sin embargo, en un mes y medio, eso puede inflamarse, infectarse y hasta se puede desencadenar una pancreatitis. Ahí, ya demasiado tarde, la persona entra por urgencia«.

En Cipolletti también se intervienen quirúrgicamente solo las urgencias, manifestó Santiago Cayupan, delegado de Asspur en esa localidad. «De la planta quedaron dos cirujanos y, a veces, se trae alguien de El Bolsón o de otros puntos de la provincia. Pero no es algo fijo. Todo depende de la disponibilidad de los cirujanos. Con dos cirujanos, hay días que no tenemos quien cubra la guardia. Entonces, tenemos gente internada sin respaldo de un cirujano de guardia. Si viene un herido de arma de fuego y no tenemos cirujano de guardia, hay que derivar. Y de acá a Roca, a 40 kilómetros, el tránsito es una lotería«, afirmó. Muchas veces, el tiempo juega en contra.

En varios hospitales se suspendieron las cirugías programadas. Foto: Chino Leiva

Respecto al cierre del área de Neonatología, dijo que debieron evacuar los neonatos al sector público y privado. «Teníamos tres neonatólogos, pero una pasó certificado y con solo dos, era inviable sostener el servicio. Ahora reabrieron el área con profesionales de otros puntos de la provincia. Pero no son más que parches para apagar el fuego«, señaló.

Cayupán agregó que el hospital de Cinco Saltos tiene un quirófano «con paredes rajadas donde los médicos no pueden operar»: «Derivan a Cipolletti, pero hay días en que no tenemos cirujanos. De modo que son derivados al sector privado con el costo que eso tiene o al Hospital de Roca».