Trabajadores de salud expresaron su repudio por los hechos de violencia

La central de trabajadores CTA convocó a la movilización tras la represión de ayer a los trabajadores estatales del sector Salud que mantenían una protesta que bloqueaba el abastecimiento de ropa de cama para los hospitales. Diversos gremios y organizaciones política y sociales acompañaron la medida de protesta.

Te puede interesar: Los estatales proponen una tregua de fin de semana para dialogar con el gobierno

Frente al hospital Castro Rendón, que ayer fue el epicentro del operativo que desplegaron grupos especiales de la policía provincial, los trabajadores mantenían ahora una vigilia. Los accesos a la institución estaban liberados aunque la atención era por guardia por el paro que también se decidió ayer.

Te puede interesar: El gobierno neuquino descontará los días no trabajados

Los pasillos de la guardia del hospital aún mostraban los signos del operativo de ayer. También el centro de la ciudad donde hubo muchas roturas en los comercios. Desde Acipan anunciaron que realizarán las denuncias correspondientes por los daños.

Aunque la calma se mantiene la tensión es evidente.

Los tres heridos que habían sido internados en el castro Rendón tras el violento desalojo con balas de goma fueron dados de alta y se recuperan en sus domicilios.

Según informaron desde el gremio estatal, uno de ellos sufrió “fractura metatarsiano expuesta” y “múltiples heridas de bala de goma” mientras que otro tuvo “pérdida de tejido y quemadura de la piel”, por los múltiples disparos de bala de goma a corta distancia. El último también sufrió lesiones graves.

Hubo más lesionados que fueron atendidos en la guardia por curaciones.

Ayer, pasadas las 17.30, los uniformaron desplegaron un intenso operativo, que necesitó de refuerzos en más de tres oportunidades, y en el que utilizaron balas de goma y gases lacrimógenos.

Los manifestantes respondieron con piedras y utilizaron contenedores de residuos como barricadas, algunas de ellas fueron incendiadas y obligaron la intervención de Bomberos.

El titular de ATE, Carlos Quintriqueo, repudió la violencia utilizada por la fuerza policial y responsabilizó al gobernador Gutiérrez y al ministro de Salud, Ricardo Corradi Diez. Les adjudicó la dilación en el conflicto que reclama la creación de un convenio colectivo de trabajo (CCT) para el sector de Salud Pública.

En tanto, Gutiérrez rechazó “el uso de la violencia como metodología para asegurar respuestas a intereses sectoriales” y ratificó que esos comportamientos originarán las denuncias judiciales y penales correspondientes. Rescató a los 55 mil trabajadores públicos “que con vocación de servicio trabajan día a día en la búsqueda del desarrollo y el progreso económico y social”. Sostuvo que “el pensamiento y el sentimiento de los empleados del Estado no es la bandera de la violencia”.

“La sociedad está harta de las expresiones de violencia”, subrayó el mandatario.

En medio de los enfrentamientos un grupo de vecinos recriminó a los efectivos el uso de gases frente al hospital. Incluso en medio de una tregua el dirigente estatal Jorge Marillán enfrentó al responsable del operativo y el intercambio terminó con más gases y balas de goma.

Los cruces se dieron frente al nosocomio, sobre las calles Alderete y Santa Fe, e incluso en sectores internos del edificio.

Más de una docena de manifestantes mostró a la prensa las heridas recibidas en rostros, brazos, piernas y otras partes de su cuerpo. También dos efectivos resultaron lesionados por impactos de piedras.