Tras las últimas pericias archivarán la causa

Tragedia en el Lácar

SAN MARTÍN DE LOS ANDES (ASM).- La autopsia del cuerpo del joven Alejandro Báez reveló múltiples lesiones y, entre ellas, una fractura potencialmente mortal en la base del cráneo, aunque no se descarta que haya caído aún con vida a las aguas del Lácar. Por eso habrá que esperar otras pericias que puedan determinar la causa última de fallecimiento.

Como fuere, el resultado de la necropsia no deja dudas respecto de que Báez murió como consecuencia de la rodada desde el faldeo con el furgón que conducía. El Mercedes Sprinter era propiedad de los padres de su novia, Laura Vázquez Proboste, también fallecida con la caída, en un hecho sospechado de feminicidio y suicidio.

El jefe de los fiscales de esta circunscripción, Fernando Rubio, confirmó que “restan algunas pericias” para cerrar las investigaciones, que estimó demandarán entre siete y diez días más, pero cualesquiera sean los resultados, la acción penal se extinguirá con la propia muerte de Báez.

Dicho de otro modo, aun en caso de que se arribe a la conclusión de que se trató de un feminicidio y suicidio y no de un accidente, no podrá continuar la persecución penal ya que no habría persona a la cual imputar el delito. Sin embargo sí habrá otras consecuencias por fuera de lo penal, como las que ayer mismo se vieron con una presentación en el Concejo Deliberante.

Nada en la ruta

De momento hay claros indicios de que el trágico desenlace, que mantuvo en vilo a esta ciudad durante varias jornadas, no fue producto de un accidente.

El sitio de la salida de vía y desbarrancamiento del Sprinter está a unos 2.000 metros del casco histórico, sobre el faldeo que corre por el Camino de Siete Lagos, en la Ruta Nacional 40.

En el lugar no se hallaron huellas de frenadas sobre el pavimento ni hubo levantamiento de ripio de la banquina, indicios que hubiesen podido sugerir algún tipo de maniobra desesperada para evitar el despeñamiento.

El furgón cayó 120 metros y la joven Laura salió despedida. Su cuerpo fue hallado de inmediato y se comprobó luego su fallecimiento por una fractura de cráneo.

Báez, en cambio, quedó dentro del habitáculo y cayó a las aguas desde una altura de 120 metros, hasta que su cuerpo fue encontrado por una cámara remota subacuática y rescatado por buzos de Prefectura Naval el pasado miércoles por la tarde, a 46 metros de profundidad.

Pero acaso los elementos más decisivos que sugieren el feminicidio y suicidio están contenidos en la sucesión de hechos inmediatamente previos al desenlace.

El cuñado de la víctima ofreció una testimonial en la que afirmó que su esposa -hermana de Laura- recibió un llamado de telefonía móvil minutos antes de la tragedia, en el que la joven advertía de una disputa con su pareja y daba a entender que temía por su integridad. Familiares de la muchacha de 23 años salieron en su búsqueda aquella noche del sábado pasado, sin éxito.

Por otra parte, Fiscalía analiza las cámaras de seguridad urbana que maneja la Policía (hay 40 en distintos puntos de la ciudad), cuyos registros de esa jornada ya fueron remitidos. Se supo que una de esas cámaras grabó la secuencia del paso del furgón hacia la Costanera del Lácar y luego hacia la Ruta 40. Trascendió también que Báez habría pedido el Mercedes Sprinter al padre de Laura ese mismo día, aunque se ignora si en aquel momento ya tenía algún tipo de intención oculta.