Aluminé, un paraíso al alcance de todos

Aluminé ofrece la combinación ideal para disfrutar en familia o entre amigos de un verdadero paraíso natural.

Por sus características, es un lugar que reúne actividades para todas las edades e intereses.

El balneario municipal es la playa por excelencia por su amplitud, cercanía al pueblo y servicios del camping parador organizado “La Playa” que tiene una especial costa de agua poco profunda, corriente calma y abundante arena. Son los niños los que más disfrutan de este sector del río debido a la amabilidad del agua.

“No obstante, a solo unos pocos metros, bordeando la costa, nos encontramos con “la correntada”, una parte en la que el furioso río arrastra a los bañistas que desafían su fuerza intentando mantenerse en pie en las grandes piedras que se esconden entre la corriente. Otros prefieren nadar o flotar para sentir la adrenalina de la velocidad en el agua sumado a los rebotes de la corriente”, cuenta la licenciada Natalia Angelino, subsecretaria de Información Pública del municipio local.

Hay quienes prefieren mantenerse secos y reunirse en la sombra por el simple encuentro con amigos, acompañados de mate, guitarra y cartas, y otros que prefieren disfrutar del ardiente sol y la cálida arena tomando sol o aprovechando la cancha de vóley playa.

“Fuera de la playa municipal tenemos un total de 100 kilómetros de río, con numerosos accesos que hacen posible la privacidad y el disfrute. Muchas de ellas están señalizadas con cartelería, pero a otras se llega a medida que se busca o por recomendación de algún conocido”, agregó la vocera municipal.

Muchas personas encuentran lugar de acampe, en áreas permitidas, o espacios para pasar el día en playas cerradas donde tienen el privilegio de estar solos o al menos con pocos vecinos.

Este tipo de personas gozan simplemente de estar frente al río oyendo su rugido constante, reposando en la arena. El descanso se transforma en la actividad predilecta de un creciente sector de personas entre locales y visitantes.

Una privilegiada ubicación

“Gracias a su privilegiada ubicación Aluminé funciona como un centro de distribución que conecta, a través de breves y amenos paseos, los parajes que lo rodean. Cada uno de ellos es único e imperdible, por lo que amerita, como mínimo, medio día de recorrida”, dijo la licenciada.

“Mientras disfrutamos de las comodidades que nos ofrece la infraestructura de un pueblo bien conformado, contamos con numerosas opciones a pocos kilómetros de la urbe que nos adentran en la naturaleza más virgen y construcciones más agrestes”, añadió.

Es característica la presencia de gran cantidad de lagos de origen glaciar y ríos caudalosos. Entre ellos se encuentran los lagos: Aluminé, Pulmarí, Ñorquinco, Moquehue, Ruca Choroy, Hui Hui, Quillén; Pilhue, y Nompehuén y los ríos Pulmarí, Ruca Choroi, Quillén, y Kilca desembocan en el más importante de la zona: el río Aluminé.

Diversión sobre el río

Practicar rafting en el río Aluminé se ha convertido en una de las principales actividades de la zona superando cada año su récord de visitantes, muchos de ellos de la zona de San Martín y del Alto Valle de Río Negro, que eligen este paisaje para descansar.

“Quizás por sus variantes dificultades, que hacen posible el disfrute de toda la familia, ya que encontramos sus vertiginosos rápidos y en contraste sus calmos sectores en los que niños y personas mayores o con alguna dificultad física pueden sentirse a salvo. Las bajadas por las transparentes aguas se enmarcan en un paisaje idílico entre Bosque Andino Patagónico y Estepa interrumpido por imponentes formaciones rocosas, hogar de cóndores, bandurrias, águilas moras, ciervos, zorros, patos de los torrentes y truchas”, sostuvo Angelino.

El sector más navegado es el de dificultad media llamado Abra Ancha, que brinda una navegación segura, pero palpitante y divertida.

Además cuenta con remansos que permiten admirar plenamente el paisaje.

Existen dos empresas habilitadas de rafting y el costo aproximado por persona es de $300 con una duración entre preparación, navegación y regreso de 2 horas y media.

Los costos del alojamiento y la comida

Se encuentran hoteles a partir de $ 500 para dos personas y desde $ 600 para cuatro personas. Las cabañas cuestan desde $ 600 para dos personas y desde $ 800 para cuatro.

Hay un 60% de ocupación para la primera quincena de enero, mientras que hay un 40% para la segunda quincena de enero y primera de febrero.

Se puede pedir comida rápida: desde $ 90 un lomo o hamburguesa casera y $ 120 por la comida regional más elaborada.

Sentarse a comer en un restaurante nos supone un gasto aproximado de entre 200 y 300 pesos con bebida.

Existen numerosas actividades gratuitas al aire libre, incluyendo el acceso a las áreas naturales protegidas.

Hay dos supermercados y varios mercados con horarios flexibles.

En números

Los visitantes que visitan las playas gozan simplemente de estar frente al río oyendo su rugido constante, reposando en la arena.

El permiso de pesca por temporada tiene un costo de $ 320 para residentes del país. El permiso diario cuesta
$ 80 y el semanal $ 160.